CDMX a 25 de mayo, 2024.- La Secretaría de Salud de la Ciudad de México (SEDESA) reafirma su compromiso con la salud de los más pequeños al lanzar una serie de recomendaciones esenciales para protegerlos de los efectos nocivos de la ola de calor que azota la capital.
Con el termómetro en ascenso, SEDESA enfatiza la importancia de proteger a los niños menores de cinco años, uno de los grupos más vulnerables frente a las altas temperaturas. Los síntomas de deshidratación pueden ser sutiles pero cruciales; boca seca, irritabilidad, llanto sin lágrimas, ojos hundidos y la fontanela, comúnmente conocida como mollera, hundida son señales de alerta.
Evitar la exposición directa al sol entre las 11:00 y las 16:00 horas es clave. Además, se recomienda vestir a los pequeños con ropa holgada y de colores claros, proteger sus cabecitas con gorras o sombreros y aplicar protector solar regularmente.
Mantener una hidratación adecuada es fundamental. Aunque no tengan sed, es importante que beban agua con regularidad. Consumir alimentos frescos, como frutas y verduras, ayuda a mantenerse hidratado y saludable.
Para prevenir la deshidratación, se sugiere implementar un plan de hidratación en casa, priorizando el consumo de agua y electrolitos. Sin embargo, se advierte contra el exceso de bebidas energizantes y sueros con edulcorantes, ya que podrían tener efectos contrarios y contener un exceso de azúcar.
En caso de presentarse síntomas de deshidratación, es crucial acudir al Centro de Salud más cercano, donde se proporcionará atención médica gratuita. Los Módulos de Rehidratación en estos centros ofrecen Vida Suero Oral para revertir la pérdida de líquidos. Si la situación es grave, los pacientes serán referidos a hospitales pediátricos públicos de la red para recibir atención urgente sin costo alguno.
Por último, se insta a ser cautelosos con el consumo de alimentos, ya que el calor puede acelerar su descomposición y aumentar el riesgo de enfermedades gastrointestinales.