En el encuentro -que encabezó el titular del Ejecutivo federal, Andrés Manuel López Obrador, en el Teatro de la República de la ciudad de Querétaro-, el senador enfatizó que los ciudadanos exigen sensatez e institucionalidad a todas las autoridades, instituciones, representantes y entes autónomos del Estado, para recuperar a la nación y lograr una justa distribución de la riqueza.
Ante la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Lucía Piña Hernández; del presidente de la Cámara de Diputados, Santiago Creel Miranda; y del gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri González, Alejandro Armenta dijo que los cambios impulsados por la Cuarta Transformación han sentado las bases jurídicas para la prosperidad y bienestar de las y los mexicanos.
Además, subrayó que la separación del Estado y la Iglesia fue tan importante, como hoy es la separación del poder económico y del poder político, que impulsa este gobierno para el beneficio de las y los mexicanos.
Desde 2018, destacó, se trabaja para pasar “de instituciones políticas extractivas que entregaron la riqueza nacional y nuestros recursos naturales al exterior, a la consolidación de las instituciones políticas inclusivas, que permitirán el desarrollo de México para las próximas generaciones”.
En breve, agregó, México alcanzará la soberanía energética, para poder aspirar a la soberanía financiera, a fin de que el sueño mexicano, de lograr la distribución justa de la riqueza, se perciba en los hogares del país.
“Ésa es la esencia concreta que inspiró a los fundadores de nuestra patria y a los reformadores de nuestras instituciones, que hoy nos convocan a compartir el 106 Aniversario de la Constitución Mexicana de 1917”, consideró el senador.
Recordó que la Constitución de 1917 incluyó por primera vez en su texto los derechos a la educación, al trabajo, a la seguridad social, a la tierra, y que los sentimientos sociales de esa etapa revolucionaria quedaron plasmados en ese año en la Constitución.
“En ese entonces, todos los constituyentes eran hombres, hoy es una realidad la paridad de género y estamos avanzando”.
El legislador recordó que a partir de 2018, por mandato soberano de más de 30 millones de mexicanos, inició la cuarta etapa de la transformación de México, que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador, acompañado del Poder Legislativo, y sin menoscabo de la independencia entre los Poderes Públicos.
Las reformas constitucionales que se han aprobado en los últimos cuatro años, subrayó Armenta, son el reflejo del humanismo mexicano que caracteriza esta etapa transformadora.
“Las reformas que hemos construido con el Presidente de la República buscan eliminar el presidencialismo abusivo y materializar la separación del poder económico del poder político. Por eso aprobamos la reforma al artículo 19 de la Constitución, para declarar como delito grave el fraude electoral, la corrupción y el robo de hidrocarburos, sinónimos de la corrupción del régimen presidencial”.
Además, explicó, el Congreso avaló la Ley de Extinción de Dominio; una legislación contra las empresas fantasmas y la facturación falsa, que fueron la base del saqueo fiscal a la patria, que tanto llena de indignación a la población.
El Congreso, explicó, aprobó la Ley de Austeridad Republicana, que es un reclamo de los mexicanos; una nueva reforma educativa; la Ley de Economía Circular para proteger la vida del planeta; y creó la Guardia Nacional.
Además, se reformó la Ley General de Salud respecto al etiquetado nutricional, pues somos el primer país en el mundo con obesidad infantil, el segundo lugar en obesidad en adultos mayores y la diabetes mellitus es la segunda causa de muerte en México.
Pero también se modificaron los artículos 108 y 111 constitucionales para la revocación del mandato, “porque el pueblo pone y el pueblo quita; así como el artículo cuarto, para convertir las dádivas en derechos a favor de los adultos mayores, las personas con discapacidad y los jóvenes.
De esta manera, acotó Alejandro Armenta, el humanismo mexicano, expresado por el Ejecutivo federal, es un concepto válido, sustentado en la razón jurídica y en la esencia de todas estas modificaciones que hemos hecho a favor de las y los mexicanos”.