CDMX a 20 de agosto, 2024.- Este lunes, el Poder Judicial de México amaneció en medio de una gran incertidumbre. Los trabajadores comenzaron un paro de labores en protesta contra la reforma judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador. La gran pregunta en la mente de muchos es: ¿qué pasará con los juicios en curso?
Según la periodista Miriam Moreno de Grupo Fórmula, los empleados en huelga han asegurado que los tribunales continuarán atendiendo casos, pero solo aquellos que sean considerados urgentes. Entre estos, destacan principalmente los asuntos de carácter penal, especialmente aquellos donde esté en juego la libertad de una persona o la vida de un individuo. Esto significa que los tribunales de circuito operarán bajo un esquema similar al implementado durante la pandemia, priorizando casos críticos.
Por otro lado, la situación podría escalar aún más esta semana. Juana Fuentes, directora de la Asociación Nacional de Jueces y Magistrados de Circuito, señaló que magistrados y jueces se reunirán este miércoles para decidir si convocan a un paro nacional, lo que podría paralizar aún más el sistema judicial del país.
El paro judicial en México no es un fenómeno aislado, sino parte de un contexto más amplio de descontento en varios sectores del gobierno y la sociedad. Las reformas propuestas por el presidente AMLO han generado divisiones, no solo en el ámbito político, sino también entre aquellos encargados de hacer cumplir la ley. Si bien la huelga actual solo afecta ciertos casos, un paro nacional podría tener consecuencias graves, retrasando juicios importantes y afectando la vida de miles de ciudadanos.
Además, es importante considerar el impacto que esto podría tener en la percepción pública del sistema judicial. La confianza en la justicia es fundamental para el funcionamiento de una sociedad, y cualquier indicio de inestabilidad puede erosionar esa confianza.