CDMX a 9 de octubre, 2024.- El diputado Éctor Jaime Ramírez Barba, del Partido Acción Nacional (PAN), ha lanzado una dura crítica al programa federal “Salud casa por casa”, anunciado por la secretaria del Bienestar, Ariadna Montiel. El legislador acusó que el programa, que pretende ser operado por 20 mil “Servidores de la Nación”, carece de los elementos necesarios para garantizar una atención médica adecuada y más bien responde a fines electorales.
Ramírez Barba destacó que, si bien la idea de llevar servicios de salud a personas vulnerables, como enfermos, adultos mayores y personas con discapacidad, es loable, el hecho de que el programa esté bajo la administración de personal sin formación técnica en salud genera gran preocupación. “La Presidenta prometió 20 mil médicos y enfermeras, no 20 mil promotores de Morena”, enfatizó en un comunicado.
El diputado recordó que, durante la pandemia de Covid-19, los “Servidores de la Nación” también estuvieron involucrados en las jornadas de vacunación, y calificó esa experiencia como «desastrosa», ya que, según él, las decisiones políticas tuvieron más peso que la salud pública.
Además, Ramírez Barba adelantó que exigirá que los programas de salud sean dirigidos por profesionales del sector, con reglas claras y orientados a mejorar la atención médica. Hizo un llamado al Gobierno Federal para que contrate personal médico capacitado, incluyendo médicos, enfermeras, psicólogos y trabajadores sociales, quienes pueden marcar una verdadera diferencia en las políticas de salud del país.
Otro de los puntos criticados por el legislador es la creación de un censo de «Salud y Bienestar», ya que asegura que el gobierno actual ha retrocedido en áreas clave como el registro de enfermedades y la planificación de la vacunación infantil. Para Ramírez Barba, este programa refleja un intento más de Morena para establecer una base electoral, en lugar de resolver las verdaderas necesidades de salud de la población.
El diputado reiteró la necesidad de que los programas de salud estén fundamentados en personal capacitado y no en decisiones políticas, insistiendo en que la atención médica debe priorizar el bienestar de los ciudadanos antes que cualquier estrategia electoral.