La explosión de un tanque de petróleo por el impacto de un cohete ruso en Vasylkiv, a las afueras de Kiev, provocó un gran incendio en la madrugada del sábado, informaron autoridades ucranianas.
Vídeos en redes sociales muestran enormes llamas en el lugar. No se ha podido verificar las imágenes.
Las autoridades decretaron toque de queda hasta el lunes en la capital, donde se cree inminente una nueva ofensiva militar rusa a gran escala.
Las sirenas de ataque aéreo suenan por toda la ciudad, complementadas con advertencias en los vecindarios para que los residentes permanezcan en los refugios.
En los últimos días gran parte de la vida en la ciudad es bajo tierra, en sótanos, refugios antiaéreos y estaciones de metro convertidas en búnkeres.
Los asaltos rusos a la capital ucraniana han encontrado, hasta el momento, una gran resistencia.
Las fuerzas armadas ucranianas informaron a través de una publicación de Facebook este sábado que una unidad del ejército logró repeler a las fuerzas rusas cerca de su base en una calle importante de la ciudad.
Muchos civiles ucranianos han recibido armas de fuego para defenderse en caso necesario y se organizan en los barrios para fabricar cócteles molotov con los que recibir a las tropas rusas.
El ejército también afirmó que logró evitar un intento de aterrizar tropas rusas aerotransportadas en un aeropuerto al sur de Kiev, informando incluso de que un gran avión que transportaba tropas había sido derribado. La BBC no pudo verificar esta información.
«Los invasores querían bloquear el centro de nuestro Estado… Quebramos su plan», agregó el presidente, Volodymyr Zelensky.
Mientras tanto, los combates continúan cerca de otras ciudades ucranianas.
El presidente reconoció que las fuerzas rusas habían infligido bajas y sostuvo que «el enemigo también ha sufrido bajas muy graves».
Según el ministro de Salud de Ucrania, Viktor Lyashko, un total de 198 ucranianos, incluidos tres niños, han muerto en medio de la invasión rusa.
Otras 1.115 personas resultaron heridas, entre ellas 33 niños, escribió en su página de Facebook.
Por su parte, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OCHCR, por sus siglas en inglés) contabilizó el sábado 64 civiles muertos y 176 heridos en todo el país, así como más de 160.000 desplazados.Indicó que los daños en viviendas e infraestructuras han dejado a cientos de personas sin acceso a agua y electricidad.
Explosiones y misiles en Kiev
La capital de Ucrania está bajo un toque de queda impuesto por el alcalde Vitali Klitschko desde las 17:00 horas (15:00 GMT).
Kiev vivió este sábado su peor amanecer desde que Rusia comenzó la invasión del territorio vecino el pasado 24 de febrero.
Zelensky había pronosticado en las últimas horas del viernes que anticipaba «una noche dura». Y los residentes de Kiev pasaron otra larga y ansiosa noche en refugios antiaéreos y sótanos.
Durante las primeras horas del sábado se empezaron a escuchar explosiones en la capital a medida que las fuerzas rusas se acercaban a la ciudad.
Un misil alcanzó un bloque de viviendas en la ciudad, dejando al menos cuatro apartamentos destruidas.
Yuri Shevchuk -que tiene 49 años y vive en la zona desde hace más de 20 años- examinaba los daños con aire de incomprensión. «No sé cómo explicar lo que siento», le dijo a la BBC. «Es la primera vez en mi vida que veo tal nivel de daño, en mi ciudad y en tiempos de paz».
Y suplicó ayuda militar de Occidente: «Tenemos una necesidad urgente de misiles antiaéreos, misiles antitanque y necesitamos municiones».
Las autoridades que dos personas murieron debido al impacto del misil. El Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania dijo que seis personas también resultaron gravemente heridas.
Más temprano, el alcalde había informado que 35 personas resultaron heridas en los combates nocturnos en la ciudad, entre las que se incluyen dos niños. Todavía no está claro si se refería solo a civiles.
«No hay tropas rusas en la ciudad», afirmó, y agregó que la gente debería permanecer en los refugios ya que se esperan más ataques aéreos.
Funcionarios de Defensa de Reino Unido dijeron que las tropas rusas han avanzado y se sitúan a 30 km de la ciudad.
Más temprano este sábado, Zelensky advirtió a los ucranianos que «no pueden permitirse perder» Kiev.
El presidente difundió un video desde las calles de la ciudad.
«Hay mucha información falsa en redes que dice que le pedí al ejército que deponga las armas y que estamos evacuando», dice.
«Estoy aquí. No depondremos las armas. Defenderemos nuestro Estado».