Halloween y el Día de Muertos son sinónimo de disfraces, pero en México, el ingenio político no se queda atrás. El comediante Ricardo O’Farrill, conocido por su humor ácido y sin censura, se robó el show al presentarse disfrazado del expresidente Andrés Manuel López Obrador, acompañado por una amiga que recreó a la presidenta Claudia Sheinbaum. Con una peluca gris y un traje que emula el estilo de AMLO, O’Farrill compartió en sus redes sociales una imagen del disfraz, acompañada de la frase: “Amados por unos, odiados por otros, ellos son: la pareja más famosa de México”.
El disfraz de O’Farrill no pasó desapercibido y rápidamente acumuló miles de comentarios en redes sociales. Entre las reacciones destaca la de Chumel Torres, comediante y crítico frecuente de AMLO, quien, en tono de broma, calificó el disfraz como «ALTA TRAICIÓN».
O’Farrill, quien también dejó claro que no pretende tomar partido en política, escribió con humor en su publicación: “Aclaro que no les manejo la orientación política, los ODIO a todos parejo”. Esta frase, lejos de calmar los ánimos, agregó un toque cómico a la situación, resonando con seguidores de diferentes puntos de vista.
El disfraz de O’Farrill es un reflejo de cómo el humor y la sátira política son formas de expresión y crítica en un país donde las figuras políticas se convierten en personajes de la cultura popular. En tiempos en los que los mexicanos enfrentan una serie de tensiones políticas y sociales, O’Farrill y otros comediantes encuentran en el humor una herramienta para exponer, de forma ligera, los contrastes y divisiones que viven día a día.