De acuerdo con datos de Petróleos Mexicanos (PEMEX) al cierre de septiembre registró un crecimiento en la producción de gasolinas, diésel y turbosina del 95%, derivado a una mayor capacidad de proceso que hay en las seis refinerías del país y a la adquisición de Deer Park.
En conferencia mañanera el presidente Andrés Manuel López Obrador destacó que el desempeño del Sistema Nacional de Refinación (SNR) es resultado del proyecto de modernización emprendido en la actual administración, donde se han destinado cerca de 45 mil millones de pesos.
Asimismo, al inicio del sexenio las seis refinerías de Salina Cruz, Minatitlán, Tula, Salamanca, Madero y Cadereyta estaban produciendo cerca del 38% de su capacidad, y actualmente deben de estar al 65 o 70%, es decir, casi el doble. Al cierre del tercer trimestre del año, el SNR, incluyendo Deer Park, procesó mil 89 millones de barriles de crudo diarios, esta es la cifra más alta registrada durante la última década.
De enero a septiembre Deer Park registra resultados sobresalientes con un desempeño mejor al que había logrado en los últimos cinco años y su rentabilidad tiene su mejor nivel desde el 2008, en conjunto a la reconfiguración del SNR se ha fortalecido la plataforma procesadora de PEMEX. Asimismo, en el mismo periodo se realizaron reparaciones en 45 plantas de proceso, 36 que corresponden al programa 2022 y 9 de programas de años anteriores.
En este año ha continuado el programa de rehabilitaciones enfocado en restituir la integridad mecánica de las plantas de procesamiento, los servicios principales y el almacenamiento. En lo que se refiere al proceso de crudo del SNR (solo en las refinerías que se encuentran en territorio nacional), se ubicó en promedio en 807 mil barriles diarios (Mbd), lo cual representa un aumento de 112 mil barriles diarios con respecto al mismo trimestre de 2021, como resultado del programa de rehabilitación de las plantas.
Por otra parte, se han invertido cerca de 150 mil millones de pesos en la construcción de dos plantas coquizadoras una en Tula y otra en Salina Cruz, mismas que recibirán el combustóleo para refinarlo y convertirlo en más gasolina y diésel. La petrolera prevé que para 2023 o principios de 2024, se dejen de comprar las gasolinas y diésel en el extranjero, con lo que estarían alcanzando la autosuficiencia energética.