Desde el 29 de febrero, el gobierno de Canadá ha impuesto nuevamente el requisito de visa para los ciudadanos mexicanos que deseen ingresar al país, invalidando miles de autorizaciones electrónicas de viaje (eTA) previamente emitidas. Esta medida ha generado incertidumbre y complicaciones para quienes planeaban viajar al país norteamericano, obligándolos a enfrentar un nuevo conjunto de requisitos y procedimientos.
Los mexicanos afectados por esta decisión han acudido a la embajada canadiense en busca de soluciones, encontrando como única opción el tramitar su visa y una nueva eTA antes de la fecha de su vuelo. Este proceso incluye la solicitud de una cita para la toma de datos biométricos, con un costo total de aproximadamente 2,400 pesos mexicanos entre la visa y los trámites biométricos.
El Departamento de Inmigración, Refugiados y Ciudadanía de Canadá (IRCC) ofrece un portal en línea para facilitar estos trámites, donde los solicitantes deben crear una cuenta, llenar un formulario y subir los documentos requeridos. Además, el pago de los trámites se puede realizar con tarjetas de crédito de varios proveedores.
En respuesta a esta situación, aerolíneas como Aeroméxico y Air Canada han implementado políticas de protección para los pasajeros afectados. Aeroméxico ofrece el reembolso completo del boleto o un cambio aplicable a cualquier ruta de la aerolínea válido por un año. Por su parte, Air Canada ha anunciado una política de «buena voluntad», comprometiéndose a trabajar individualmente con cada pasajero para ofrecer soluciones adecuadas.
Esta medida refleja las complejidades y desafíos que enfrentan los viajeros internacionales en el contexto actual, subrayando la importancia de estar informado y preparado para cambios regulatorios inesperados.