Las redes sociales han transformado la forma en que nos comunicamos e interactuamos, y en México, también han influido en la política de seguridad pública. Este reportaje analiza cómo las redes sociales están impactando en la seguridad pública en México y cómo las autoridades están utilizando estas plataformas para mejorar la seguridad y la relación con la ciudadanía.
Las redes sociales permiten una conversación continua con la ciudadanía, facilitando la consolidación de nexos con el entorno y nuevas pautas de relación con las
Administraciones Públicas.
Además, ofrecen una gran variedad de alternativas para realizar seguimiento y control de gestión.
Sin embargo, también han abierto puertas a una serie de problemas relacionados con la seguridad ciudadana, como el aumento de delitos cibernéticos y la difusión de desinformación y noticias falsas.
La tecnología en seguridad pública es hoy en día una necesidad imperante para la seguridad de los mexicanos a partir de soluciones basadas en la Nube, el Internet de las Cosas (IoT), Inteligencia Artificial y la Geolocalización.
El gobierno de México, los observatorios, las instituciones policiales y las unidades de análisis del crimen y la violencia deben adoptar estas tecnologías y emerger como actores fundamentales en el diagnóstico de problemas.
La Policía Cibernética en la Ciudad de México realiza funciones de monitoreo y patrullaje las 24 horas del día en redes sociales y fuentes abiertas de internet, para identificar publicaciones y/o actividades inusuales que puedan ser riesgosas.
Además, brindan atención a la ciudadanía por llamadas telefónicas y correos electrónicos, así como a las solicitudes que reciben por parte del Sistema Unificado de Atención Ciudadana (SUAC) y la App Mi Policía.
En conclusión, las redes sociales pueden ser una herramienta poderosa para mejorar la seguridad pública en México, pero también pueden ser un medio para la propagación de delitos cibernéticos y desinformación. Es crucial que se tomen medidas para combatir estos problemas y promover un uso seguro y responsable de las redes sociales.