Con una ejecución casi perfecta y una concentración inquebrantable, Randal Willars se alzó como campeón en la prueba individual de plataforma en la Copa Mundial de Clavados, celebrada en Guadalajara. El deportista no solo logró su mejor desempeño en la piscina, sino que también llevó el nombre de México a lo más alto del podio, superando a favoritos como los clavadistas chinos Zifeng Zhu y Zilong Cheng.
Willars, de 23 años, mantuvo un promedio superior a 91 puntos por clavado, culminando con una puntuación total de 547.70, casi 80 puntos por encima del segundo lugar. Su dominio fue tal que, tras adelantarse en la tercera ronda con un espectacular salto de tres vueltas atrás con parada de mano, ya no hubo rival que pudiera alcanzarlo. Los competidores asiáticos, conocidos por su precisión, cedieron ante la presión y cometieron errores que los alejaron del oro.
El clímax llegó en el último salto: Willars ejecutó un impresionante giro de 4.5 vueltas al frente, con un grado de dificultad de 4.1, que le valió una puntuación de 105.55 y selló su victoria. A pesar del triunfo, el atleta se mostró humilde: «Hay mucho que mejorar, mucho que trabajar», declaró, demostrando que su ambición va más allá de este logro.
La jornada fue histórica para México, que horas antes había celebrado otro oro en la prueba sincronizada masculina de trampolín, gracias a la dupla formada por Osmar Olvera y Juan Celaya. Con estos resultados, el país cerró su participación en la primera etapa del Mundial con dos preseas doradas y cuatro de plata, ubicándose como la segunda potencia detrás de China, que dominó siete de las nueve pruebas.
El evento continuará en Windsor, Canadá, donde los clavadistas buscarán mantener su ritmo rumbo a los próximos desafíos internacionales. Por ahora, el nombre de Randal Willars ya quedó grabado en la historia del clavado mexicano.