Por Berenice Pérez
CDMX a 18 de octubre de 2024.-Con una explosión de color, tradición y arte, la alcaldía de Tláhuac presenta el Festival Internacional de Día de Muertos (Fiddem) bajo el lema «Que Viva la Vida, También en la Otra Vida». Durante los días 29, 30 y 31 de octubre, y el 1 y 2 de noviembre, las calles y plazas de esta emblemática demarcación se llenarán de vida, con actividades que honran una de las tradiciones más queridas de México.
Berenice Hernández, alcaldesa de Tláhuac, destacó el carácter único de este festival, señalando que Tláhuac es «cuna de tradición, arte y música». Con la vibrante flor de cempasúchil, cultivada en los siete pueblos originarios de la zona, la festividad promete ser un verdadero espectáculo visual.
Actividades para todos los gustos
El evento, que tendrá lugar en la explanada de la alcaldía y sus alrededores, ofrecerá una rica muestra de cultura popular, desde talleres y exposiciones hasta una expoventa artesanal. Los asistentes podrán degustar lo mejor de la gastronomía tradicional, incluyendo el pan de muerto, protagonista de un concurso donde los mejores panaderos serán reconocidos por su habilidad.
El festival también contará con espectáculos creados por la comunidad, como presentaciones de ballet, música y canto. Entre las estrellas locales, Brandon Chávez, un joven talento, emocionará al público con su interpretación de «La Llorona», demostrando que los niños también tienen un papel fundamental en la conservación de estas tradiciones.
Un festival de talla internacional
La celebración no se limita al talento local. Este año, el Fiddem contará con la participación de artistas internacionales provenientes de Colombia, Bolivia y Guatemala, enriqueciendo el intercambio cultural y haciendo de Tláhuac un punto de encuentro entre culturas.
Con una asistencia esperada de entre 4 y 5 millones de personas, tanto nacionales como internacionales, la alcaldía ha preparado vías de acceso cómodas y seguras. Además, se contará con traductores en inglés y francés, facilitando la participación de los visitantes extranjeros.
La comunidad de los siete pueblos originarios está emocionada por recibir a los asistentes y compartir la calidez y riqueza de sus costumbres. Todo está listo para vivir una experiencia inolvidable en Tláhuac, donde la tradición y la modernidad se entrelazan para celebrar la vida y la muerte.