¡Que siempre sí! Diez compradores europeos de gas ruso abren cuentas bancarias para pagar en rublos

En medio de las tensiones geopolíticas entre Rusia y la Unión Europea y sus relaciones económicas y energéticas, 10 compradores de gas ruso abrieron cuentas bancarias para pagar el suministro energético en rublos.
En total, ya son 20 los clientes de la gasera rusa Gazprom que han gestionado ajustes para pagar el suministro en rublos, luego de que así lo solicitara Rusia ante las sanciones económicas que Estados Unidos ha impuesto al Kremlin como represalia por la operación militar especial que sostiene en el territorio ucraniano desde finales de febrero de 2022.
Los clientes han abierto cuentas bancarias en Gazprombank JSC, la entidad financiera de la firma energética, para operar los pagos del suministro en la moneda rusa, informó Bloomberg.
Además de los 20 clientes europeos adaptados a esta medida, 14 más han solicitado el inicio de los trámites correspondientes para sumarse a esta condición, de acuerdo con el sitio noticioso especializado en finanzas internacionales, sustentado en una fuente anónima.
Al menos cuatro compradores europeos de gas ruso ya han ejecutado pagos en rublos, en un escenario en el que Rusia es central en el mercado mundial de gas y fundamental para el suministro del energético en Europa.
Rusia contiene las reservas de gas natural más grandes del mundo y provee del 40% de su suministro a la Unión Europea, por lo que a pesar de las sanciones impuestas contra Moscú por ahora esa relación económica es irrenunciable para el occidente.
El precio del energético ha aumentado hasta 300% en relación con el mismo periodo de 2021, si bien alcanzó su máximo histórico, a 300 euros por megawatt hora, en los momentos posteriores inmediatos al inicio de la operación militar especial de Rusia en Ucrania.
Además, la producción de grano y petróleo de Rusia es también preponderante en el panorama alimenticio y energético mundial, por lo que las sanciones contra el país euroasiático, de acuerdo con diferentes analistas, están teniendo un efecto boomerang que golpea las economías de los mismos países que las aplican.