Aclarando que se tiene en caja un presupuesto de 500 mil millones de pesos y que podrían ocuparse en temas de seguridad, este jueves, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador negó que con la modificación a la Ley de Instituciones de Crédito para que el dinero olvidado por los clientes pueda ser obtenido como beneficiario por la hacienda pública, implique el que su administración desee confiscarle bienes a las personas.
En este marco, el tabasqueño exhortó al Senado donde llegó tras aprobarse el la Cámara de Diputados, a dar toda la información de lo que esto implica y que no haya lugar a falsas informaciones.
Se calcula, que los recursos en el rubro de estar olvidados por los clientes de los bancos superan los 10 mil millones de pesos.
Esto, a decir del líder de la mayoría de Morena en la Cámara baja, Ignacio Mier, quien a nombre del grupo del Movimiento de Regeneración Nacional, presentó la iniciativa para que estos recursos tampoco se queden a favor de los bancos y de sus dueños.