Lagos de Moreno es uno de esos pueblos pintorescos que enamoran a primera vista por su arquitectura y el encanto de sus habitantes, esta ciudad fue fundada en 1563 por un grupo de familias españolas bajo el nombre de Villa de Santa María de los Lagos.
Ubicado al noroeste del estado de Jalisco, el Pueblo Mágico de Lagos de Moreno se encuentra en la región de los Altos de Jalisco a casi dos mil metros sobre el nivel del mar, es por ello que la mayor parte del año su clima es seco y, durante una corta temporada del invierno, llegan a caer heladas.
¿Cómo llegar?
Si estás en León, Guanajuato, basta con que tomes tu automóvil y conduzcas durante 45 minutos para llegar a Lagos de Moreno; desde Aguascalientes es un camino de una hora 20 minutos y viniendo de Guadalajara el camino por carretera es un poco más largo, aproximadamente, dos horas con 15 minutos.
Las familias que fundaron Lagos de Moreno buscaban practicar la minería, una actividad que fue poco próspera en comparación con ciudades como Tlalpujahua de Rayón, Michoacán o Mineral del Monte, Hidalgo.
Históricos tesoros
El Centro Histórico de Lagos de Moreno resguarda una serie de joyas arquitectónicas que son reconocidas como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco. Este pueblo mágico también forma parte del Camino Real de Tierra Adentro: la ruta comercial que iba desde la Ciudad de México a Santa Fe, Nuevo México, del siglo XVI al XIX.
Actualmente, Lagos de Moreno tiene opciones para que toda la familia se divierta y descubra su riqueza cultural y natural. Lograrás la mejor vista desde el Cerro de la Calavera en donde se encuentra el Templo del Calvario con su fachada inspirada en la de la Basílica de San Pedro, en El Vaticano.
Una de sus actividades principales es la ganadería por lo que fabrican calzado de muy buena calidad y artesanías de cuero y madera para decorar tu casa y siempre recordar tu paso por este lugar de cielo despejado e imponentes construcciones barrocas, neoclásicas y haciendas.