Tras varios días de intensas protestas y bloqueos, los productores de cebada de Puebla e Hidalgo han decidido levantar sus plantones en un intento de encontrar una solución a su conflicto con Heineken. Los agricultores han estado demandando que la cervecera respete el precio acordado en 2022, de 8,680 pesos por tonelada. Sin embargo, Heineken ha ofrecido solo 7,430 pesos, generando una diferencia de 1,200 pesos menos por tonelada que los productores consideran inaceptable.
A pesar de las intensas negociaciones y los bloqueos de las instalaciones de Heineken en varias localidades, las partes no han llegado a un acuerdo definitivo. Los productores han advertido que, si no se alcanza un consenso pronto, podrían expandir sus protestas a otros estados, intensificando aún más la tensión en la cadena de suministro de cebada en México.
La situación ha llamado la atención de la Federación y del gobierno de Puebla, quienes han intervenido para facilitar las negociaciones en un esfuerzo por evitar mayores conflictos. Con más de 40 años de colaboración entre los agricultores y Heineken, la relación entre ambos es crucial para la producción de cerveza en México. La falta de un acuerdo está poniendo en riesgo esta alianza histórica y destacando la importancia de cumplir con los compromisos pactados para evitar mayores tensiones en el sector agrícola.