CDMX, 7 de marzo del 2022.- La mexicana Sashenka Gutiérrez, ganadora este miércoles del premio Ortega y Gasset en la categoría de mejor fotografía. Es una fotorreportera del otro lado de las mentiras, confiada en que la honestidad es la clave para lograr buenas imágenes. La imagen ganadora es de de una paciente de cáncer sometida a una mastectomía bilateral que le salvó la vida.
La obra premiada es una imagen tomada a Sandra Monroy, paciente de cáncer sometida a una mastectomía bilateral que le salvó la vida. Una imagen, que según el jurado, captura un momento de máximo dolor, en el que la herida es todavía reciente, y aun así logra transmitir esperanza.
Según EFE, el jurado de la 39 edición de estos premios que otorga el diario español “El País” dio a conocer los mejores trabajos periodísticos en español publicados a lo largo de 2021 en las categorías de “Mejor historia” o investigación periodística, “Mejor cobertura multimedia”, “Mejor fotografía” y “Mejor trayectoria profesional”.
El jurado resaltó la imagen tomada por Gutiérrez porque “captura un momento de máximo dolor, en el que la herida es todavía reciente y que aun así logra transmitir esperanza”.
El valor de esta fotografía reside “en el inusual retrato de una intimidad cruda, que afecta a muchas mujeres en todo el mundo”, agregó.
Los Premios Ortega y Gasset
Los Premios Ortega y Gasset, creados en 1984 por el diario español El País y que llevan el nombre del pensador y periodista español. Buscan resaltar la defensa de las libertades, la independencia y el rigor como virtudes esenciales del periodismo y dar reconocimiento a aquellos trabajos que hayan destacado por su calidad.
Sobre el cáncer de mama y la mastectomía bilateral
Aunque ha estado presente desde hace miles de años, en fechas recientes el cáncer de mama se ha convertido en un problema de salud pública. Todo es debido al aumento exponencial tanto en su incidencia como en su tasa de mortalidad. Pero mientras antes era una enfermedad exclusiva de la edad adulta ahora ha cambiado y cada vez se presenta con mayor frecuencia en mujeres jóvenes.
Tan solo en México ya ocupa el primer lugar entre las neoplasias y se ubica en el tercer y cuarto de las causas de muerte, destaca el profesor de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Medicina (FM) y médico clínico en el Instituto Nacional de Cancerología, Gilberto Nicolás Solorza Luna. La mortalidad es muy alta porque las pacientes acuden tardíamente a consulta médica, sobre todo a las instituciones de salud.
“Al médico privado llegan las que tienen el recurso, el cuidado y la educación para hacerse la mastografía anualmente después de los 40 años, que es lo recomendable, pero son minoría”.
A nivel nacional, la tasa de mortalidad es de 17.19 defunciones por cada 100 mil mujeres de 20 años o más. Los estados de la República mexicana con menores tasas (de 9.29 a 13.64) son: Quintana Roo, Chiapas, Oaxaca, Yucatán, Campeche, Colima, Guerrero, Morelos, Hidalgo, Tabasco.
Entre las mujeres que fallecen por esta causa, uno por ciento son mujeres jóvenes de 15 a 29 años de edad, 13 por ciento de 30 a 44 años y más de la tercera parte (38 por ciento), está entre los 45 a 59 años; la mayoría muere después de los 59 años (48 por ciento).
A nivel mundial, cada año se detectan 1.38 millones de casos nuevos de este carcinoma y, en promedio, 480 mil decesos anuales, según datos de la OMS.
Mastectomía doble
Por otro lado, una mastectomía es una cirugía para extirpar todo el tejido mamario de una mama como una forma de tratar o prevenir el cáncer de mama. Para aquellas mujeres con cáncer de mama en estadio temprano, la mastectomía puede ser una opción de tratamiento.
La mastectomía doble se lleva a cabo como cirugía de reducción de riesgo en las mujeres con un riesgo muy alto de padecer cáncer de seno, como las mujeres con una mutación en el gen BRCA. La mayoría de estas mastectomías son mastectomías simples, pero algunas podrían preservar el pezón.
Hay otras circunstancias en las que se podría hacer una mastectomía doble como parte de un plan de tratamiento del cáncer de seno. Esto se hace después de una cuidadosa consideración y conversación entre la paciente y su equipo de atención médica contra el cáncer.
LA IMPORTANCIA DE LA PREVENCIÓN
Algunas personas desarrollan cáncer de mama aún sin factores de riesgo conocidos, por lo que es recomendable la autoexploración mensual desde los 20 años; a partir de los 25 años acudir anualmente a exploración clínica de las mamas y la mastografía cada dos años, desde los 40 y hasta los 69 años.