CDMX a 4 de enero, 2024.- El presidente Andrés Manuel López Obrador ha revelado la amenaza que motivó su decisión de entregar el control de los puertos, aduanas y aeropuertos de México a la Secretaría de Marina (Semar): «plata o plomo».
Esta advertencia, emitida por grupos criminales que controlaban estos puntos de acceso al país, puso en peligro a los trabajadores de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), quienes no podían resistir las amenazas y las tentaciones del dinero.
La corrupción en los puertos y aeropuertos de México había alcanzado niveles alarmantes, con la delincuencia organizada y la delincuencia de cuello blanco trabajando en contubernio para controlar estos puntos estratégicos.
Los aeropuertos, en particular, eran codiciados por grupos criminales como ‘Los Chapitos’, hijos de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán y líderes del Cártel de Sinaloa, para el tráfico de sustancias ilícitas a diferentes partes del mundo.
La decisión de AMLO de entregar el control de estos puntos a la Semar fue cuestionada y costó la renuncia del entonces titular de la SCT, Javier Jiménez Espriú.
Sin embargo, el presidente sostuvo que era necesario para el interés general y para impedir el tráfico de drogas y el contrabando.
Desde que la Semar asumió el control, ha habido cambios significativos. Las fuerzas armadas de México han tomado el control del principal aeropuerto de la capital, el Aeropuerto Internacional Benito Juárez, y se espera que asuman el control total de todas las operaciones, desde aduanas e inmigración hasta el manejo del equipaje y la limpieza de los baños.
A pesar de las críticas y preocupaciones sobre la militarización de la nación, el presidente López Obrador y el secretario de Marina, Rafael Ojeda Guzmán, han asegurado que no habrá militarización de los puertos y aduanas.
En cambio, se enfocarán en erradicar cualquier acto de corrupción y malos manejos.