“Las expresiones de las autoridades mexicanas constituyen una injerencia en los asuntos internos del Perú, y no resultan consistentes con los acontecimientos que se han sucedido en días recientes”, se lee en el comunicado.
Sobre la voluntad del Gobierno de México de otorgarle asilo a Pedro Castillo Terrones, para lo que México ha iniciado un proceso de consultas en el Perú, el Ministerio de Relaciones Exteriores indicó que, a través del embajador, se le transmitió la necesidad de que los estados se apeguen a las normas de los tratados internacionales.
“Con relación a las declaraciones de dichas autoridades respecto al derecho de asilo invocado por el expresidente Pedro Castillo, se señaló al Embajador Monroy la necesidad de que los estados se ciñan a las normas contenidas en los tratados internacionales vigentes sobre la materia y cumplan con todos los requisitos que los mismos establecen”, expresó.
Esto ocurre luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador se negó a seguir a países como Estados Unidos que han reconocido al nuevo gobierno de Dina Boluarte, quien asumió el poder tras la destitución de Pedro Castillo, el pasado miércoles.
En su conferencia del pasado jueves 8 de diciembre, AMLO reiteró su inconformidad por la destitución de Pedro Castillo y la consideró “ilegítima”; sin embargo al ser cuestionado sobre si reconocerá el gobierno de Dina Boluarte, expresó que a México “no le gusta el seguidismo”.
“Son varios gobiernos, pero México es México. Somos libres, independientes, soberanos y tenemos una tradición de política exterior y no nos gusta el seguidismo”, expresó AMLO, quien acotó que la crisis política en el Perú no pone en riesgo las relaciones bilaterales.