En el transcurso de tres años, desde su reinicio en 2020, Petróleos Mexicanos (PEMEX) experimentó un crecimiento en la producción de urea, al llegar a un total de 210 mil toneladas para finales de 2023, es decir, un aumento de 650% en comparación con las 28 mil toneladas inicialmente producidas.
El total de 855 mil toneladas es la cifra proyectada para este 2024 por parte de la empresa productiva del Estado en Coatzacoalcos. Esto se debe al reinicio de la producción de urea hace tres años con la planta I, que estuvo inactiva durante 21 años, y al próximo arranque de la planta de Urea II en marzo de este año.
Octavio Romero Oropeza, al frente de PEMEX, señaló que en el periodo gubernamental anterior, se efectuó la compra inadecuada de Agronitrogenados (actualmente Pro-Agroindustria) y Grupo Fertinal, al pagar más de lo debido por activos en deterioro. No obstante, bajo la dirección del actual mandatario, se rectificó este error, con una recuperación de 216 millones de dólares, destinados a la restauración de estas fábricas para mejorar la producción agrícola y asegurar la autosuficiencia alimentaria.
La participación de PEMEX en el programa Fertilizantes para el Bienestar fue esencial para la distribución de urea desde la planta de Coatzacoalcos, al beneficiar así a cerca de 190 mil agricultores. Además de su rol en la producción, PEMEX facilitó el transporte del fertilizante desde las plantas nacionales hasta los puertos y las 10 macrobodegas en territorio mexicano.
El programa de fertilizantes de PEMEX está en constante evolución, con el objetivo de cubrir el 100% de la demanda para el cierre del 2024. Si bien en 2023 se logró un 70% de la meta, se espera que para 2024 la producción aumente al 84.2%, al marcar un hito en la iniciativa.
Desde su prueba piloto en Guerrero en 2019, el Programa de Fertilizantes para el Bienestar se extendió progresivamente por todo el país, al llegar a cubrir actualmente a todas las entidades y beneficiando a dos millones de pequeños productores previstos para este año. La expansión comenzó en la región central, al abarcar Morelos, Puebla y Tlaxcala.
Con una inversión total de más de 15 mil 100 millones de pesos, se prevé que al cierre de esta administración se hayan reparado dos plantas de urea, cuatro de amoniaco, la rehabilitación integral de la planta de fertilizantes en Lázaro Cárdenas y la mina de roca fosfórica en Baja California Sur en materia de fertilizantes, según informó el directivo.