En busca de alcanzar su meta hacia el 2030, Petróleos Mexicanos (PEMEX) se planteó, como parte de su Plan de Sostenibilidad, duplicar el nivel de reúso de agua hasta alcanzar 56.4 millones de metros cúbicos y reducir el uso de agua en sus refinerías en un 39%.
La empresa productiva del Estado, respaldada por un documento aprobado por el Consejo de Administración, apunta a una reducción del 42 por ciento en el uso del agua en los Complejos Procesadores de Gas (CPG) como parte de un esfuerzo mayor para mejorar el uso del agua en todas sus operaciones de transformación industrial.
Con una disminución prevista del 76% en el consumo de agua para los derivados del etano, el plan de la empresa también prevé reducciones del 50% en metanol y aromáticos, y del 9% en amoniaco.
Respecto a la inversión en sostenibilidad, componentes ambientales y seguridad industrial, la empresa aportó más de nueve mil millones de pesos durante el año 2023.
El agua figura como el segundo tema de mayor importancia para la petrolera mexicana, según su plan en materia de sostenibilidad, que también tiene como objetivos la reducción del impacto ambiental y el fortalecimiento de las medidas para la conservación de la biodiversidad.
Además de cumplir con sus compromisos internacionales, el cuidado del agua permite a PEMEX obtener ahorros, al ser esta una de las acciones clave dentro del pilar Medio ambiente que se enfoca en los temas materiales más relevantes para el sector petróleo y gas.
Otra de las metas significativas para la empresa productiva del Estado consiste en disminuir las emisiones de metano en un 30% para el año 2030, además de reducir la quema rutinaria de gas al 2% en 2024 y eliminarla completamente en un lapso de seis años.
“A través del Plan de Sostenibilidad, PEMEX refrenda su compromiso con el desarrollo sostenible; proporciona los elementos para guiar las actividades de las y los trabajadores petroleros hacia una administración responsable de los recursos, privilegiando una gestión eficiente del entorno”, destacó el director general de PEMEX, Octavio Romero Oropeza.
Las oportunidades de negocio de bajo carbono se presentan como una vía para que la empresa productiva del Estado pueda diversificar sus ingresos y mitigar los riesgos inherentes a la transición en un contexto mundial marcado por la ambición climática.