Por Bruno Cortés
En medio de un clima de tensión política, la diputada Noemí Luna Ayala, coordinadora del Grupo Parlamentario del PAN, no se guardó nada y arremetió contra el oficialismo, acusándolo de disfrazar el autoritarismo de democracia. Según ella, mientras Morena sostiene la Constitución con una mano, con la otra empuja su agenda personal, violando leyes e instituciones y traicionando al pueblo que dice representar.
Luna Ayala denunció la «crisis de legalidad e institucionalidad» que vive el país, señalando que el Congreso se ha convertido en un campo de batalla donde Morena usa su «aplanadora» para aprobar urgentemente reformas constitucionales que, a su juicio, son impuestas por el expresidente Andrés Manuel López Obrador y continuadas por Claudia Sheinbaum. La diputada critica que, hasta ahora, el oficialismo no ha acatado más de 70 suspensiones dictadas por jueces en varias entidades, lo que plantea una pregunta inquietante: “¿seguimos en una república o ya vivimos en una dictadura?”
Desde su perspectiva, lo que antes era un sistema democrático se ha vuelto una «fachada grotesca» que oculta un creciente autoritarismo. Recordó que a lo largo de la historia, muchos de los peores conflictos han sido justificados por líderes que decían actuar en nombre del pueblo. Este tipo de retórica la preocupa profundamente.
Luna Ayala no olvidó señalar que la crisis comenzó en el sexenio pasado, cuando López Obrador desafiaba constantemente la ley, y cómo este legado ahora pesa sobre Sheinbaum. Con un paquete de 20 reformas, de las cuales 18 son constitucionales, la presidenta está, según la diputada, «culminando la obra de destrucción de la República». La rapidez con la que se están aprobando estas reformas en el Congreso, en menos de un mes, es vista como una maniobra para consolidar el poder.
El oficialismo, sostiene, ha hecho de la polarización su bandera, manipulando la percepción pública y atemorizando a los jueces que defienden la legalidad. Luna Ayala expresó su solidaridad con aquellos que han sufrido represalias por tomar decisiones judiciales que chocan con los intereses del gobierno, mencionando específicamente a la jueza Nancy Juárez, quien ha emitido órdenes en contra de las reformas sin que se cumplan.
Finalmente, hizo un llamado contundente: desde el PAN se exige un respeto absoluto a la Constitución y se condena la intimidación hacia los jueces. La diputada solicitó a la Suprema Corte de Justicia de la Nación que tome cartas en el asunto ante las violaciones que el Ejecutivo ha hecho a las resoluciones judiciales y pidió a Sheinbaum que garantice el cumplimiento de la ley.
Con este panorama, la situación en el Congreso se vuelve cada vez más tensa y los ciudadanos deben estar atentos a cómo se desarrollan estos acontecimientos, ya que la forma en que se maneje la legalidad y la institucionalidad en el país tendrá repercusiones significativas en el futuro de la democracia en México.