CDMX a 14 de agosoto, 2024.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha vuelto a encender las alarmas globales al declarar el brote de mpox, anteriormente conocida como viruela del mono, como una emergencia de salud pública de alcance internacional. Esta decisión se tomó ante el creciente número de contagios reportados, principalmente en África, con un foco crítico en la República Democrática del Congo (RDC).
El mpox, una enfermedad viral que afecta tanto a humanos como a animales, ha generado preocupación debido a su rápida propagación en regiones cercanas a la RDC. Este virus, que se transmite a través del contacto directo con lesiones en la piel, fluidos corporales y gotículas respiratorias, ha demostrado una capacidad alarmante para expandirse, afectando a poblaciones vulnerables y con acceso limitado a servicios de salud.
El Director General de la OMS, Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, subrayó la urgencia de esta situación, destacando la necesidad de una respuesta coordinada y global para contener el brote. «El mpox es una amenaza que no podemos subestimar. Es esencial que todos los países trabajen juntos para detener su propagación y proteger la salud pública a nivel mundial», afirmó.
La declaración de emergencia sanitaria internacional es un llamado a la acción para los gobiernos, organizaciones de salud y la comunidad internacional. Se espera que esta medida acelere la investigación científica, la producción de vacunas y la implementación de estrategias de control en las regiones más afectadas.
Hasta ahora, las autoridades sanitarias están enfocadas en la vigilancia epidemiológica, la sensibilización de la población sobre las medidas preventivas y la provisión de recursos médicos para las áreas más impactadas. Sin embargo, la expansión del brote más allá de las fronteras de África central ha generado una creciente preocupación sobre su potencial para convertirse en una pandemia.
El mpox fue descubierto por primera vez en 1958 en colonias de monos utilizados para la investigación, de ahí su nombre original. Aunque inicialmente se consideraba una enfermedad zoonótica rara, en las últimas décadas ha habido brotes esporádicos, principalmente en África occidental y central. El brote actual es uno de los más significativos en términos de alcance geográfico y número de casos.