Norma Piña insta a AMLO y Sheinbaum a dialogar sobre reforma judicial
Editor web Maya Comunicación 
En un llamado sin precedentes, Norma Lucía Piña Hernández, ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), hizo un llamado este lunes al presidente Andrés Manuel López Obrador y a la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, para entablar un diálogo crucial sobre la Reforma al Poder Judicial de la Federación. Piña Hernández expresó preocupación por los términos actuales de la reforma, alertando sobre posibles retrocesos en el sistema de justicia mexicano si se aprueba en su forma actual.
Durante el Encuentro Nacional para una Agenda de Seguridad y Justicia, celebrado en el Centro Cultural Tlatelolco, la ministra presidenta destacó la necesidad urgente de revisar integralmente el sistema de seguridad y justicia, subrayando que cualquier reforma debe abordar las necesidades fundamentales de las víctimas y usuarios del sistema judicial.
«La realidad es que la reforma no aborda el problema de raíz», enfatizó Piña Hernández, instando a un diálogo inclusivo que considere los hallazgos y recomendaciones surgidos del encuentro nacional. Además, hizo eco de las críticas recientes por parte de colegas, como la ministra Yasmín Esquivel, respecto al nivel de comunicación con los poderes Ejecutivo y Legislativo, abogando por un acercamiento directo con las autoridades responsables de impulsar la reforma desde el Congreso, actualmente dominado por Morena.
Piña Hernández no escatimó en advertencias sobre los posibles efectos adversos de una reforma apresurada o mal concebida. Insistió en que cualquier modificación al sistema judicial debe abordar las causas profundas de los problemas detectados, advirtiendo sobre el riesgo de privilegiar la popularidad sobre la competencia en la selección de jueces y magistrados.
La propuesta de reforma presentada por el presidente López Obrador en febrero incluye cambios significativos, como la elección por voto popular de los miembros de la SCJN y de los jueces y magistrados. Sin embargo, Piña Hernández considera que dichos cambios podrían no ser suficientes para mejorar sustancialmente el sistema judicial, destacando la necesidad de un enfoque integral que no solo remueva individuos del sistema, sino que transforme las estructuras y procedimientos que rigen la justicia en México.
En este contexto, la ministra presidenta reiteró su llamado al diálogo y a la reflexión profunda sobre los impactos potenciales de la reforma propuesta, con la esperanza de que se abran espacios para un análisis detallado y una discusión amplia que involucre a todos los actores y operadores del sistema judicial mexicano.
Norma Lucía Piña Hernández concluyó su intervención subrayando que una reforma precipitada o superficial no resolverá los problemas de fondo y podría incluso agravar la incertidumbre y la desconfianza en el sistema de justicia de México, un aspecto vital para la estabilidad y la equidad en la aplicación de la ley en el país.
Este llamado al diálogo por parte de la ministra presidenta marca un punto crucial en el debate sobre la reforma judicial en México, invitando a las más altas autoridades del país a considerar cuidadosamente las implicaciones de las decisiones que están por tomarse en el ámbito legislativo.
