En una conferencia matutina este lunes, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reafirmó su compromiso con la memoria de Luis Donaldo Colosio, expresando su esperanza de que nunca más se toleren atrocidades como su asesinato en 1994, un evento que aún resuena en la historia política del país.
Colosio, candidato presidencial del Partido Revolucionario Institucional (PRI), fue mortalmente herido durante un mitin en Tijuana, un crimen que conmocionó a México y alteró el curso de la política nacional. López Obrador subrayó la importancia de la investigación continua, no solo para castigar a los responsables materiales e intelectuales, sino también para enviar un mensaje claro de no repetición de tales actos infames, especialmente si implican crímenes de Estado.
El mandatario también abordó recientes desarrollos en el caso, incluida la controversia judicial en torno al procesamiento de Mario Aburto, el asesino confeso de Colosio. Recientemente, un tribunal argumentó que Aburto debería ser juzgado bajo el código penal estatal en lugar del federal, una decisión que podría reducir significativamente su condena y potencialmente llevar a su liberación anticipada. Sin embargo, la Fiscalía General de la República (FGR) ha apelado esta decisión, buscando mantener la sentencia original.
López Obrador hizo un llamado al Poder Judicial para que resuelva la apelación de manera justa y expedita, destacando la importancia de aclarar cualquier sospecha pendiente en el caso de Colosio después de décadas de incertidumbre. También recordó las conexiones presuntamente políticas y criminales que rodean el caso, incluyendo la implicación de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública bajo el gobierno de Enrique Peña Nieto, actualmente en prisión en Estados Unidos por cargos de corrupción y narcotráfico.
El presidente descartó cualquier intento de aprovechar políticamente el caso en el contexto electoral reciente, enfatizando que la resolución final del caso recaerá en la próxima administración, encabezada por Claudia Sheinbaum, quien asumirá la presidencia de México el 1 de octubre.
Concluyendo, López Obrador reiteró su compromiso con la verdad y la justicia en el caso Colosio, subrayando la importancia de aclarar los hechos para honrar adecuadamente la memoria del líder político y restaurar la confianza pública en las instituciones judiciales del país.