El coordinador de los diputados del Grupo Parlamentario del PRI, Rubén Moreira Valdez señaló que ante la ola de violencia que sigue azotando al estado de Guerrero, es necesario y urgente una respuesta clara por parte de las autoridades estatales, así como acciones eficaces que contribuyan a salvaguardar la integridad y la tranquilidad de las y los guerrerenses.
Por ello, en concordancia con lo que apunta en su libro, “Jaque Mate al crimen organizado”, firmado también por Rubén Aguilar, para que los ejecutivos estatales cumplan con su obligación, solicitó a la Comisión Permanente exhortar a la gobernadora y a la autoridad de justicia y seguridad en la entidad, investigar a fondo los actos de violencia y la masacre de pobladores ocurridos en la localidad El Durazno, el pasado 10 de diciembre.
“Un país de leyes debe garantizar la paz, gobernabilidad y salvaguarda de todas y todos los habitantes, de lo contrario, ante omisión de actuación y atención se estarían ante un Estado fallido”, enfatizó el legislador priista.
En la fundamentación, el líder congresista expuso que actualmente casi siete de cada 10 homicidios dolosos que se registran en México, ocurren en alguno de los 10 estados más violentos del país, entre ellos, anotó, se encuentra Guerrero, entidad donde se ha evidenciado cómo las células criminales se han infiltrado en la vida de los pobladores.
Precisó que en los hechos ocurridos en esta localidad que pertenece al municipio de Coyuca de Catalán, se advierte que presuntos miembros del grupo delictivo “La Familia Michoacana”, entraron a la comunidad El Durazno y, asesinaron a siete pobladores, entre ellos un menor de 15 años.
El legislador Moreira Valdez indicó a pesar de las llamadas de auxilio, fueron más de 12 horas después de ocurrida la masacre, cuando acudió al lugar el secretario de Seguridad Pública Estatal, Evelio Méndez Gómez, con otras autoridades e informó que ya mantenían “atención y diálogo con las y los pobladores”.
El exgobernador de Coahuila dijo que además la nula respuesta a las denuncias de asesinatos, secuestros y extorsiones, registradas en esta zona, entre 2018 y 2020, por grupos delincuenciales, queda de manifiesto la poca empatía de las autoridades para resolver el problema de violencia que existe, pues los tiempos de respuesta de las fuerzas policiales estatales son muy tardías.
Por ello, recalcó que para salvaguardar la integridad y la tranquilidad de las y los guerrerenses, se requiere un compromiso de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda y de la Fiscalía estatal, para aclarar lo ocurrido en El Durazno.