CDMX a 12 de abril, 2024.- En un cambio significativo en el manejo de su caso, Jesús Murillo Karam, exprocurador durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, ha sido trasladado del Reclusorio Norte a prisión domiciliaria en su residencia de Lomas de Chapultepec. Esta decisión del juez, que incluye la no utilización de brazalete electrónico, subraya un capítulo crucial en la trayectoria legal del exfuncionario, implicado en múltiples controversias durante su mandato.
Murillo Karam, que también fue una figura clave en la investigación del caso Ayotzinapa, que sigue generando debates y demandas de justicia, salió bajo estrictas medidas de seguridad. El juez ordenó la entrega de su pasaporte y visa, además de imponer una alerta migratoria para evitar su salida del país o de la Ciudad de México. Estas medidas buscan garantizar que el exprocurador permanezca en el país mientras enfrenta los procesos legales en su contra.
La decisión de otorgar prisión domiciliaria sin brazalete electrónico ha generado diversas opiniones. Algunos sectores critican la aparente laxitud de las medidas, dada la gravedad de las acusaciones contra Murillo Karam, mientras que otros argumentan que su estado de salud y su edad justifican la decisión del juez.
El caso de Murillo Karam es emblemático de los desafíos que enfrenta el sistema judicial mexicano en términos de manejo de figuras políticas acusadas de corrupción y otros delitos graves. Su desarrollo es seguido de cerca tanto por medios nacionales como internacionales, reflejando el persistente clamor por una reforma judicial y una mayor transparencia en el manejo de casos de alta relevancia.