En un movimiento estratégico dentro del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno ha solicitado licencia a su cargo como presidente nacional del partido, abriendo paso a un proceso interno crucial para la renovación de su dirigencia. Esta decisión marca el inicio de una etapa determinante para el futuro del PRI, uno de los partidos políticos más antiguos y prominentes de México.
Según informes de Juan Becerra Acosta, Graciela Ortiz, actual secretaria de Organización del PRI, se vislumbra como una figura prominente para suceder a Moreno Cárdenas en la presidencia del partido. Ortiz, con una trayectoria destacada dentro de la estructura del PRI, podría desempeñar un papel fundamental en la nueva fase del partido, en caso de ser elegida.
El coordinador del PRI en la Cámara de Diputados, Rubén Moreira, confirmó recientemente a Radio Fórmula que tanto Alejandro Moreno como Carolina Viggiano han solicitado licencia como legisladores, con el objetivo de concentrarse plenamente en el proceso interno del partido. Viggiano, actual secretaria general del PRI, buscará su reelección en este cargo estratégico.
El mes pasado, durante una asamblea del PRI, se aprobaron importantes reformas estatutarias que permiten la reelección de Alejandro Moreno Cárdenas como presidente del partido hasta el año 2032. Estas modificaciones también abren la posibilidad de la reelección para la Secretaría Ejecutiva, actualmente ocupada por Carolina Viggiano Austria.
Este proceso interno no solo definirá la dirección futura del PRI, sino que también podría influir significativamente en el panorama político de México, dado el peso histórico y la influencia del partido. La capacidad de Alejandro Moreno para consolidar su liderazgo podría ser determinante en cómo el PRI se posiciona de cara a las próximas elecciones y en su papel dentro del Congreso mexicano.
El PRI, conocido por su capacidad de adaptación y su estructura organizativa robusta, enfrenta ahora el desafío de mantener su relevancia y atraer a una nueva generación de líderes y votantes, mientras navega un entorno político cada vez más dinámico y competitivo en México.
El proceso de selección interna promete ser un punto de inflexión para el partido, con repercusiones que podrían resonar en el ámbito político nacional. Con figuras clave como Alejandro Moreno y Carolina Viggiano jugando roles centrales, el PRI busca reafirmar su posición como un actor fundamental en la política mexicana contemporánea.