CDMX a 3 de abril, 2024.- En un momento crítico del proceso electoral en Guanajuato, el partido Morena ha elevado una petición sin precedentes al Instituto Nacional Electoral (INE), exigiendo «protección extraordinaria» para 40 de sus candidatos en el estado. Esta solicitud surge en respuesta al trágico asesinato de Gisela Gaytán, candidata morenista a la presidencia municipal de Celaya, que fue asesinada en pleno arranque de su campaña electoral.
Sergio Gutiérrez Luna, representante de Morena ante el INE, envió un oficio a Guadalupe Taddei, consejera presidenta del organismo, denunciando las condiciones de violencia en las que los candidatos de su partido están llevando a cabo su campaña de cara a las elecciones del 2 de junio de 2024. La preocupación es tal que Gutiérrez Luna acusó tanto al gobierno estatal de Guanajuato como al Instituto Electoral del Estado de Guanajuato (IEEG) de no comprometerse con la seguridad necesaria para sus candidatos.
La solicitud de Morena implica que el INE, tradicionalmente encargado de la protección de las candidaturas federales, haga una excepción y supervise directamente la seguridad de los candidatos en Guanajuato. Esta medida extraordinaria se considera vital para asegurar la vida e integridad de los candidatos morenistas frente a una situación que, según Gutiérrez Luna, ha alcanzado niveles críticos de negligencia por parte de las autoridades estatales y electorales locales.
«Ante la falta de atención del Gobierno del Estado de Guanajuato y la omisión de atención por parte del IEEG, es imperativo que el INE intervenga de manera excepcional», escribió Gutiérrez Luna en su misiva a Taddei. Esta declaración subraya la urgencia de implementar medidas de seguridad robustas que protejan a los participantes en el proceso electoral de Guanajuato, un estado que ha visto un aumento preocupante en actos de violencia relacionados con el crimen organizado.
La violencia política en México no es un fenómeno nuevo, pero el asesinato de candidatos y figuras públicas durante los periodos electorales ha puesto de relieve la necesidad de estrategias de seguridad más eficaces y específicas. La situación en Guanajuato se ha convertido en un caso de estudio sobre cómo la violencia puede influir en el desarrollo democrático y en la seguridad de quienes se atreven a participar en la política.
Mientras el INE y las autoridades federales de seguridad consideran la petición de Morena, la comunidad política y civil de Guanajuato, así como del resto del país, esperan acciones concretas que puedan garantizar unas elecciones libres de intimidación y violencia. La seguridad de los candidatos no solo es una cuestión de justicia individual, sino un componente fundamental del derecho a la participación política y democrática en México.