Por Bruno Cortés
El grupo parlamentario de Morena en el Estado de México ha presentado dos iniciativas que buscan mejorar la inclusión, la equidad y la seguridad de los habitantes de la entidad. Las propuestas se centran en garantizar espacios seguros para la comunidad LGBTQ+ y reconocer las necesidades laborales de las mujeres que padecen endometriosis o dismenorrea incapacitante. A continuación, se analizan ambas iniciativas y sus posibles repercusiones en la sociedad mexiquense.
La primera de estas propuestas se enfoca en la inclusión dentro de los planteles educativos. Morena busca reformar la Ley de Educación del Estado de México para establecer políticas públicas que protejan los derechos de la diversidad sexogenérica. Esta reforma pretende la instalación de baños neutros en las escuelas, una medida que tiene como objetivo proporcionar espacios libres de discriminación para todos los estudiantes, en particular para aquellos que forman parte de la comunidad LGBTQ+.
La iniciativa de los baños neutros promueve la creación de entornos educativos más inclusivos y respetuosos, permitiendo que los alumnos utilicen los baños sin temor a ser discriminados. El objetivo es garantizar un entorno donde todos los estudiantes, independientemente de su identidad de género, puedan desarrollar su educación con total seguridad y libertad. Esto es visto como un paso importante en la construcción de una sociedad más igualitaria, que respete los derechos humanos fundamentales de todas las personas.
Por otro lado, el grupo parlamentario de Morena también ha presentado una segunda iniciativa que tiene como propósito el bienestar de las mujeres que enfrentan condiciones ginecológicas dolorosas y debilitantes. La propuesta establece que las servidoras públicas y el personal de las instituciones de seguridad pública que padezcan endometriosis o dismenorrea incapacitante puedan acceder a una licencia menstrual con goce de sueldo. Esta licencia, que podría ser de entre uno y tres días naturales al mes, busca reconocer la gravedad de estas condiciones de salud, que a menudo afectan la calidad de vida de las mujeres, impidiéndoles desempeñar sus actividades laborales con normalidad.
Para poder acceder a este beneficio, las trabajadoras deberán presentar un certificado médico expedido por un especialista en ginecología del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMyM) o del Sistema Estatal de Salud. Con esta medida, se pretende reconocer oficialmente la endometriosis y la dismenorrea como condiciones médicas que merecen ser tratadas con seriedad en el ámbito laboral, fomentando una mayor comprensión y apoyo por parte de los empleadores y compañeros de trabajo.
Sin embargo, ambas iniciativas no han estado exentas de controversia. La propuesta de los baños neutros ha generado opiniones divididas, con algunos sectores que consideran que es un avance importante en derechos humanos, pero también con críticos que cuestionan su viabilidad e implementación dentro de las comunidades escolares. Por su parte, la propuesta de la licencia menstrual también ha sido objeto de debate, ya que algunos plantean dudas sobre los mecanismos de aplicación y los posibles efectos sobre la productividad laboral.
A pesar de los desacuerdos, estas iniciativas forman parte de los esfuerzos de Morena por promover una sociedad más inclusiva y equitativa en el Estado de México. Ahora, las propuestas deben pasar por el proceso legislativo correspondiente, donde los diputados del Congreso local discutirán su viabilidad y las posibles modificaciones antes de que puedan ser aprobadas y puestas en marcha.