CDMX a 24 de agosto, 2024.- El Instituto Nacional Electoral (INE) aprobó recientemente la distribución de escaños plurinominales en el Senado, una decisión que dejó al partido Morena sin la mayoría calificada que buscaba alcanzar. Con esta nueva configuración, el bloque Morena-PT-PVEM se queda a solo dos escaños de poder aprobar reformas constitucionales sin necesidad de apoyo de la oposición, lo que marca un cambio significativo en el panorama político del país.
El Nuevo Mapa del Senado: Morena en la Cuerda Floja
A partir del 1 de septiembre, el Senado de la República estará compuesto de la siguiente manera:
Morena: 60 senadores
Partido Verde Ecologista de México (PVEM): 14 senadores
Partido del Trabajo (PT): 9 senadores
Por otro lado, la oposición se distribuye de la siguiente forma:
Partido Acción Nacional (PAN): 22 senadores
Partido Revolucionario Institucional (PRI): 16 senadores
Movimiento Ciudadano (MC): 5 senadores
Partido de la Revolución Democrática (PRD): 2 senadores
Esta nueva composición significa que, aunque el bloque Morena-PT-PVEM tendrá 83 de los 128 senadores, se queda a dos escaños de la mayoría calificada, que requiere 85. Sin esta mayoría, Morena y sus aliados no podrán aprobar reformas constitucionales sin buscar acuerdos con al menos algunos senadores de la oposición.
La decisión del INE de aprobar el reparto de escaños es crucial, ya que limita el poder de Morena y sus aliados en el Senado. Esto significa que, para llevar a cabo reformas constitucionales, deberán buscar consensos con partidos de oposición, un escenario que podría complicar la aprobación de iniciativas clave del gobierno.
La falta de mayoría calificada obligará a Morena a negociar y dialogar más activamente con otras fuerzas políticas, lo que podría resultar en un Senado más plural y deliberativo. Esta nueva dinámica también podría aumentar la relevancia de partidos más pequeños, como Movimiento Ciudadano y el PRD, que podrían tener un papel más decisivo en futuras negociaciones.
Desde el bloque opositor, se ha recibido la noticia con optimismo. El PAN, PRI, MC y PRD han manifestado que esta distribución equilibrada de fuerzas permitirá un Senado más representativo y justo. Sin embargo, desde Morena y sus aliados, se percibe como un desafío que deberán superar mediante el diálogo y la búsqueda de consensos con los demás grupos parlamentarios.
El líder de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, comentó que, aunque no alcanzaron la mayoría calificada, seguirán trabajando para impulsar las reformas necesarias para el país. «Nos enfrentamos a un nuevo reto, pero estamos preparados para dialogar y encontrar puntos de acuerdo que beneficien a todos los mexicanos», afirmó.
Con la nueva composición del Senado, se anticipa un periodo legislativo marcado por la negociación y el consenso. Este escenario podría favorecer la creación de políticas más inclusivas y equilibradas, donde las diversas voces en el Senado se vean reflejadas en las decisiones que se tomen.
Para Morena y sus aliados, el reto será mantener su agenda de reformas mientras buscan el apoyo necesario entre los partidos de oposición. Para la oposición, es una oportunidad de influir más en el rumbo legislativo del país y de proponer alternativas que reflejen sus plataformas políticas.