Ciudad de México, 7 de diciembre de 2023 – El Tesoro de Estados Unidos y la Secretaría de Hacienda de México anunciaron este jueves la firma de un acuerdo bilateral. Este pacto tiene como objetivo principal fortalecer el control de las inversiones extranjeras para mejorar la seguridad nacional, incluyendo el intercambio regular de información sobre mejores prácticas.
Esta iniciativa forma parte de un esfuerzo más amplio del gobierno del presidente Joe Biden para promover a México como un destino de inversión clave para las cadenas de suministro estadounidenses. La administración de Biden busca asegurar que México posea un régimen de evaluación sólido capaz de manejar eficientemente la creciente afluencia de inversiones extranjeras.
El acuerdo pretende asistir a México en el desarrollo de un organismo de evaluación de inversiones extranjeras, similar al Comité de Inversión Extranjera de Estados Unidos (CFIUS), que es administrado por el Tesoro estadounidense. El CFIUS se encarga de revisar las adquisiciones de empresas estadounidenses por entidades extranjeras y otras inversiones entrantes, para asegurarse de que no representen riesgos para la seguridad nacional.
Janet Yellen, secretaria del Tesoro de EE.UU., destacó la importancia de este acuerdo durante el anuncio del memorando de intención con el secretario de Hacienda mexicano, Rogelio Ramírez de la O. «Al igual que nuestro propio régimen de control de inversiones, un mayor compromiso con México ayudará a mantener un clima de inversión abierto mientras se monitorean y abordan los riesgos de seguridad, haciendo que ambos países sean más seguros», afirmó Yellen.
La firma de este acuerdo concluye una visita de tres días de Yellen a la Ciudad de México, que ha tenido como objetivo no solo mejorar los lazos económicos, sino también impulsar la cooperación en la lucha contra el flujo del opioide fentanilo a Estados Unidos. El fentanilo, un potente opioide, ha sido un problema creciente, ya que a menudo se mezclan sus precursores químicos en México, procedentes de China.
Este acuerdo representa un paso significativo en la relación bilateral entre México y Estados Unidos, no solo en términos económicos, sino también en la búsqueda de una mayor seguridad y estabilidad en la región. Con la cooperación reforzada en el control de inversiones, ambos países buscan crear un entorno más seguro y próspero para sus ciudadanos.