Reporteros Sin Fronteras dio a conocer su Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2022 en la que México mejora su posición respecto de 2021, para pasar del sitio 143 al 127.
Destaca que el Barómetro de la organización sólo lista a 4 de las al menos 8 personas periodistas asesinadas en lo que va del 2022 pues, de acuerdo con su portal, «solo incluye a los periodistas que RSF ha podido establecer con certeza que fueron asesinados/encarcelados a causa de sus actividades como periodistas», por lo que únicamente se menciona a José Luis Gamboa Arenas, Margarito Martínez Esquivel, Lourdes Maldonado y Héber López.
Al tenor de estos hechos, Reporteros sin Fronteras considera que México es el segundo país en el mundo con la peor situación de seguridad para la prensa, superado únicamente por Birmania y seguido de cerca por Eritrea, Yemen, Corea del Norte, Siria e Irán. Este indicador «evalúa la capacidad de concebir, recabar y difundir informaciones, de acuerdo a los métodos y la ética del periodismo, sin arriesgarse a padecer daños físicos, sufrimiento psicológico o emocional, ni perjuicios profesionales».
La Clasificación ubica también a México como el sexto país del continente con la peor situación en materia de libertad de prensa superado por Colombia, Venezuela, Nicaragua, Honduras y Cuba (en ese orden). Solamente Costa Rica se encuentra entre los 10 territorios con mejor calificación del mundo al ubicarse en la octava posición (y tercera en materia de seguridad), mientras que Jamaica, Canadá, Argentina y República Dominicana reciben las mejores puntuaciones de la región ocupando los puestos 12, 19, 29 y 30 del ranking general, respectivamente.
Focos rojos en América Latina
De acuerdo con el análisis de la organización, las personas periodistas en toda América «desarrollan su labor informativa en un entorno cada vez más deteriorado y tóxico». El norte y centro del continente se vuelven el foco de atención pues Canadá retrocede 5 puestos luego de los ataques físicos y verbales por integrantes del Convoy de la Libertad 2022 —negacionistas de la COVID 19—, mientras que la persecución y acoso contra la prensa aumenta su agresividad en países como México —donde «López Obrador y otras figuras destacadas del Estado han adoptado una retórica tan violenta como estigmatizante contra los periodistas«— o Nicaragua, que perdió 39 posiciones pues quienes ejercen el oficio «están estigmatizados y afrontan campañas de acoso, detenciones arbitrarias y amenazas de muerte«.
El Salvador es otro país centroamericano que retrocedió de forma importante en materia de libertad de prensa, pasando del puesto 82 al 112 en 2022. Según informa RSF, esto se debe a que «el presidente Nayib Bukele hostiga a los periodistas con la peligrosa táctica de presentar a los medios como enemigos del pueblo». En materia de seguridad, destacan el espionaje telefónico contra 35 personas gracias a Pegasus, incluidas personas periodistas e integrantes de organizaciones de la sociedad civil.
Por su parte, Honduras sigue sumida en lo que RSF califica como «un lento descenso al infierno desde hace más de una década». Al descender de la posición 151 a la 165 en 2022, preocupa el «acoso e intimidación, amenazas de muerte o exilios forzosos» contra «periodistas de la prensa afín a la oposición» y los medios comunitarios.
Mientras, Cuba se mantiene en el fondo de la tabla junto a Palestina, Siria, Irak o Corea del Norte —ocupando la posición 173— debido al estricto control gubernamental de la información. La detención el 2021 de los intérpretes de Patria y Vida capturó la atención internacional desvelando la vigilancia extrema del gobierno castrista contra lo que consideran «ataques a la Revolución». •