CDMX a 9 de noviembre, 2022.- El ministro de Turismo de México, Miguel Torruco, aseguró hoy aquí que su país se prepara para responder a los nuevos desafíos que enfrenta la llamada industria sin humo después de la pandemia de Covid-19.
El perfil del turista ha cambiado, y México se está preparando para responder a esos nuevos retos, aseguró el funcionario en declaraciones durante el World Travel Market (WTM), el mayor evento de agencias de viajes y turoperadores del mundo que concluyó este miércoles en Londres.
Según Torruco, el viajero internacional busca ahora espacios abiertos, y más contacto con la naturaleza, la cultura, la gastronomía y la población de los lugares que visita.
En ese sentido, ponderó el proyecto del Tren Maya, que a partir de 2023 permitirá al turista recorrer diferentes regiones de México.
Se trata de una de las grandes innovaciones hechas por el gobierno del presidente Andrés López Obrador al sector turístico, remarcó Torruco, quien participó la víspera en la cumbre de ministros organizada por la Organización Mundial del Turismo y el Consejo Mundial de Viajes y Turismo en el marco de la feria de Londres.
Vaticinó además que México va a cerrar el 2022 con 24 millones de turistas extranjeros recibidos, y 26 mil 100 millones de dólares en ingresos por ese concepto, después de terminar en segundo lugar el año pasado (solo superado por Francia) en cantidad de viajeros, y en el noveno puesto entre los mayores captadores de divisas.
En su opinión, ese alto nivel de recuperación que exhibe ahora su país se debe, sobre todo, a que nunca se cerró el espacio aéreo, y a la rápida implementación de los protocolos sanitarios, y a los esfuerzos realizados por las autoridades para obtener las vacunas anti Covid-19.
Al margen de los nuevos desafíos pospandémicos que enfrenta el turismo internacional, el ministro destacó la importancia del mercado doméstico, al cual calificó como la piedra angular del sector.
Al respecto, afirmó que en México, el turismo nacional representa el 78 por ciento, y que tan solo en 2019, se desplazaron 258 millones de viajeros locales, y de ellos, 110 millones utilizaron instalaciones hoteleras, para una “derrama” de 140 mil millones de dólares.