CDMX, 21 de septiembre del 2022.- Los líderes de las tres principales potencias de América Latina (México, Brasil y Argentina) se posicionaron en contra de las sanciones económicas contra Rusia dado que su impacto se resiente en todo el mundo.
El primero en pronunciarse fue el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, durante su tradicional conferencia matutina. A pregunta expresa de Sputnik, el mandatario reiteró que está en contra de las sanciones, del envío de armas y nuevamente se pronunció en favor de una intervención que permita definir una tregua de cinco años entre Rusia y Ucrania.
«Produce mucho sufrimiento, pérdida de vidas humanas, desplazados, refugiados y, además de eso, que es lo más preocupante, la pérdida de vidas humanas, que eso parece no tomarlo en cuenta quién está pensando en prolongar el conflicto y en estar enviando armas o que no se haga nada por detener la confrontación», afirmó López Obrador, destacando que esa situación ya desató la inflación mundial. El mandatario adelantó que México reiterará dicha posición, este 22 de septiembre, en el marco de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas.
Precisamente durante la asamblea realizada en la sede de la ONU, en Nueva York, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, aseguró que su país no considera que «el mejor camino sea la adopción de sanciones unilaterales y selectivas contrarias al derecho internacional», y que a su vez repercuten en el resto de las naciones.
Las consecuencias del conflicto ya se hacen sentir en los precios mundiales de alimentos, de combustibles y de otros insumos. Estos impactos nos colocan a todos en contra de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (de la ONU)», declaró el presidente brasileño.
Bolsonaro afirmó que su país ha tratado de «evitar el bloqueo de los canales de diálogo» entre las partes involucradas, pues su administración está en «contra del aislamiento diplomático y económico».
«Defendemos un alto al fuego inmediato, la protección de civiles y no combatientes, la preservación de la infraestructura crítica para asistencia a la población, y el mantenimiento de todos los canales de diálogo entre las partes en conflicto», convocó el mandatario brasileño.
Por su parte, durante su intervención ante la Asamblea General de la ONU, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, recordó que su país siempre ha pregonado por la resolución pacífica de los conflictos, por lo que hizo un llamado a acabar con «todas las hostilidades desatadas».
«Debemos recuperar el imperio de la paz. Es imperioso que cesen todas las hostilidades desatadas. Necesitamos trabajar unidos para imponer el diálogo y recuperar la paz en la disputa iniciada con el avance militar de la Federación Rusa sobre el territorio de Ucrania2, declaró Fernández.
En este sentido, el mandatario argentino comentó que seguirá «fortaleciendo la tradición de Argentina basada en los principios del Derecho Internacional Humanitario, en el respeto irrestricto de la soberanía de los Estados, en la autodeterminación de los pueblos».
Por ello, suscribió, además, el llamado a acabar con las «medidas unilaterales de coerción» implementadas en contra de países como Cuba y Venezuela.