El cariño por los gatos es universal, pero su presencia en entornos naturales puede tener graves consecuencias para la biodiversidad. Un reciente estudio advierte que los gatos cimarrones y asilvestrados, al cazar especies autóctonas, se convierten en una amenaza significativa para la fauna local, especialmente para pequeños reptiles como las lagartijas.
🐾 Gatos domésticos, cimarrones y asilvestrados: diferencias clave
No todos los gatos tienen el mismo impacto en el medio ambiente. Existen tres tipos principales según su estilo de vida:
- Gatos domésticos: Viven en hogares, algunos con acceso a jardines, pero bajo supervisión.
- Gatos cimarrones o comunitarios: Viven en colonias al aire libre, alimentados por personas, pero sin un hogar fijo.
- Gatos asilvestrados: Han perdido el contacto con los humanos y sobreviven cazando en el medio natural.
El problema surge cuando los gatos comunitarios y asilvestrados, al no depender de la caza para alimentarse, capturan presas silvestres por instinto. Esto agrava su impacto, ya que cazan más de lo necesario para sobrevivir.
📉 Un impacto preocupante: del instinto a la extinción
Según el estudio, los gatos son responsables del 14% de las extinciones registradas de pequeños mamíferos, aves y reptiles a nivel mundial. Un caso alarmante es el de las lagartijas, que han desaparecido de muchas zonas urbanas y periurbanas debido a la alta densidad de gatos comunitarios.
En Sant Cugat del Vallès, Cataluña, se registró que en áreas con hasta 55 gatos comunitarios, la lagartija parda (Podarcis liolepis) ha desaparecido por completo. Las que sobreviven son más pequeñas, más esquivas y presentan mutilaciones en sus colas debido a los ataques.
🦎 El precio de sobrevivir: estrés y mutilaciones en lagartijas
Las lagartijas emplean un mecanismo de defensa llamado autotomía, que consiste en desprenderse de su cola para escapar de los depredadores. Sin embargo, esta estrategia tiene un alto costo:
- Menor movilidad: Al perder la cola, disminuyen su capacidad para huir de futuros ataques.
- Crecimiento más lento: Regenerar la cola consume energía que se resta a su desarrollo.
- Estrés crónico: La constante presión predatoria afecta su comportamiento y supervivencia.
⚖️ Un debate entre bienestar animal y conservación
Pese a la evidencia científica, la protección de la fauna autóctona choca con posturas sociales y legales. En España, por ejemplo, la ley 7/2023 sobre bienestar animal prohíbe reubicar colonias felinas salvo en casos muy específicos, lo que limita las acciones de conservación.
Es crucial diferenciar entre gatos domésticos esterilizados, que no representan un peligro si se mantienen bajo control, y gatos cimarrones o asilvestrados, cuya proliferación descontrolada amenaza la biodiversidad local.
🌿 ¿Cómo encontrar un equilibrio?
- Esterilización masiva y control de colonias: Reducir el número de gatos comunitarios y prevenir su asilvestramiento.
- Educación y concienciación: Informar sobre el impacto de los gatos en la fauna local.
- Fomentar la tenencia responsable: Evitar que los gatos domésticos ronden sin supervisión.
Los gatos pueden ser compañeros entrañables, pero su impacto en el medio natural es innegable. Proteger la biodiversidad no significa estar en contra de los gatos, sino promover su cuidado responsable. Con estrategias adecuadas, es posible preservar tanto el bienestar animal como el equilibrio ecológico.