CDMX a 9 de agosto, 2024.- El Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres Guadarrama, ha anunciado la suspensión de los polígonos de actuación y los sistemas de transferencia de potencialidad en los cascos históricos de los pueblos y barrios originarios de la ciudad. Esta medida, publicada hoy en la Gaceta Oficial por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (SEDUVI), busca proteger estos espacios frente a proyectos de desarrollo urbano de alto impacto que podrían amenazar su conservación.
Durante un evento en la Alcaldía Xochimilco, donde se entregaron créditos del Fondo para el Desarrollo Social (FONDESO), Batres explicó que la decisión se deriva del Decreto emitido el 1 de agosto, que ordena acciones y medidas para la protección de las Áreas de Conservación Patrimonial y los espacios tradicionales de los pueblos y barrios de la Ciudad de México.
El decreto y el acuerdo publicado por SEDUVI responden a las preocupaciones expresadas por los habitantes de pueblos originarios que han visto cómo la construcción de torres y centros comerciales amenaza su forma de vida. «Muchos habitantes nos decían que con la llegada de estos proyectos, el costo de vida en sus comunidades aumentaba, y temían ser expulsados de sus propios pueblos», señaló Batres.
El mandatario enfatizó que estas acciones son cruciales para mantener el arraigo de los habitantes y preservar la arquitectura y el entorno de estas comunidades históricas. «Queremos proteger a los pueblos para que el desarrollo de alto impacto no los destruya ni los afecte», afirmó.
El acuerdo de SEDUVI aplica a 135 Áreas de Conservación Patrimonial, suspendiendo la emisión de diversos procesos administrativos que permiten la construcción y desarrollo en estos espacios. Entre las suspensiones se encuentran los Dictámenes de aplicación de la normatividad de uso del suelo, los Certificados Únicos de Zonificación de Uso del Suelo, y los Dictámenes para la Constitución de Polígonos de Actuación, entre otros.
Además, la SEDUVI se reserva la facultad de solicitar la declaratoria como Patrimonio Cultural Histórico para otros espacios que, aunque no estén actualmente incluidos dentro de los 135 polígonos, también requieren protección.
Este nuevo acuerdo representa un compromiso firme del gobierno de la Ciudad de México con la protección del patrimonio cultural y la identidad de los pueblos y barrios originarios. Batres expresó su confianza en que estas medidas ayudarán a preservar la integridad de estos lugares y evitarán que los habitantes sean desplazados por el desarrollo urbano.
La medida ha sido bien recibida por las comunidades locales, que ven en esta acción un paso importante hacia la preservación de su historia y sus tradiciones.