Por Bruno Cortés
¿Sabías que están intentando quitarte la posibilidad de defenderte ante decisiones del gobierno? Eso es lo que denunció el senador Marko Cortés en plena discusión en el Senado sobre una reforma constitucional propuesta por Morena. Pero, ¿de qué va todo esto y por qué debería importarte? Aquí te lo explicamos de manera sencilla.
La reforma que está en el centro de la polémica busca hacer algo que suena técnico, pero que tiene un impacto muy real: eliminar la posibilidad de impugnar o cuestionar legalmente las reformas a la Constitución. Esto significa que si el Congreso aprueba un cambio, no habrá manera de revertirlo o llevarlo a los tribunales, sin importar si fue un atropello o si va en contra de tus derechos. «Están eliminando el amparo y cualquier control constitucional», alertó Marko Cortés.
Lo que se está discutiendo es que, una vez aprobada una reforma constitucional, no se podrá interponer ningún recurso legal. Esto incluye el amparo, la acción de inconstitucionalidad y la controversia constitucional, herramientas que son clave para defendernos como ciudadanos ante abusos del poder.
Según Cortés, esta medida es peligrosa porque quita el derecho a defendernos cuando el gobierno comete errores o pasa leyes que van en contra de nuestros derechos. “¿A qué le temen que la Corte revise? ¿Por qué eliminar el control constitucional?”, cuestionó.
Marko Cortés no es el único que está preocupado. Para muchos, esta reforma podría abrir la puerta a un gobierno sin contrapesos, donde las decisiones se tomen sin la posibilidad de que sean revisadas. “Hoy nos aplican la aplanadora, como en los viejos tiempos del PRI”, denunció, recordando aquellos días en los que un solo partido decidía sin escuchar a las minorías.
Por su parte, los legisladores de Morena, encabezados por figuras como Adán Augusto López, defienden esta reforma diciendo que es necesaria para evitar que el Poder Judicial bloquee decisiones que ya fueron aprobadas democráticamente. Para ellos, el actual sistema judicial retrasa los cambios que México necesita y favorece a los intereses de minorías que quieren frenar el progreso del país.
Pero Cortés no se queda callado. En su intervención, afirmó que esta obsesión por controlar el Poder Judicial podría terminar dañando al país más de lo que piensan. “Ustedes que lucharon por la democracia, ¿por qué ahora no escuchan las voces de la oposición?”, lanzó a sus colegas del Senado.
El debate está lejos de terminar, y lo que está en juego es mucho más que una simple reforma. La pregunta que queda en el aire es: ¿de verdad queremos un país donde no se pueda cuestionar al poder? Según Marko Cortés, lo que está pasando en el Senado podría cambiar radicalmente el equilibrio de poder en México, dejando a los ciudadanos sin defensa ante posibles abusos.
Al final del día, lo que debemos preguntarnos es si esta reforma realmente ayuda a fortalecer la democracia o si, como advierte Cortés, es un paso hacia el control total del poder. Lo que se decida en las próximas semanas tendrá repercusiones profundas para todos, y es un debate que no podemos perder de vista.