La tercera jornada de la fase de grupos de la Champions League dejó grandes emociones para los aficionados del fútbol europeo. Mientras que el Manchester City se encargó de hacer historia con un récord impresionante, el Atlético de Madrid sufrió una inesperada derrota en casa, y el Liverpool mantuvo su paso perfecto en el torneo.
Los dirigidos por Pep Guardiola siguen dejando huella en Europa. Con una goleada de 5-0 sobre el Sparta Praga, los «Citizens» no solo aseguraron los tres puntos, sino que también rompieron un récord histórico: el equipo inglés alcanzó los 26 partidos consecutivos sin conocer la derrota en la Champions League, superando el anterior registro de su acérrimo rival, el Manchester United, que se mantuvo invicto en 25 encuentros entre 2007 y 2009 bajo el mando de Alex Ferguson.
Este logro del City no fue bien recibido por la mitad roja de Manchester, ya que refuerza la supremacía actual del equipo celeste, que sigue consolidándose como uno de los favoritos para levantar la «Orejona» este año.
En Alemania, el Liverpool volvió a demostrar que está en un gran momento al vencer al RB Leipzig por 1-0 gracias a un gol de Darwin Núñez, el delantero uruguayo que se está consolidando como pieza clave del equipo. Con este resultado, el Liverpool no solo suma su tercera victoria consecutiva en la competición, sino que también comparte el liderato del grupo junto al Aston Villa.
El equipo ahora dirigido por Arne Slot ha sabido mantener el nivel competitivo que dejó su predecesor, Jürgen Klopp, y se perfila como otro de los grandes contendientes en esta edición de la Champions.
La sorpresa de la jornada fue la derrota del Atlético de Madrid en casa. El equipo colchonero venía de una racha impresionante de 11 partidos invictos como local en la Champions, pero el Lille francés los derrotó por 3-1. A pesar de haber eliminado al Real Madrid en la ronda anterior, los de Simeone no pudieron con la presión y terminaron cediendo puntos valiosos en su lucha por avanzar a la siguiente fase.
El Brest logró un empate 1-1 con el Bayer Leverkusen gracias a un golazo de Pierre Lees-Melou, manteniendo su invicto en la competencia. Mientras tanto, el Celtic frustró al Atalanta con un empate sin goles, en un partido que careció de grandes emociones, pero sirvió para que ambos equipos mantuvieran sus aspiraciones en el torneo.