El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva asistirá hoy a la reunión para constituir el consejo político de su campaña junto a líderes de siete partidos que declararon apoyo a su candidatura electoral.
Participará en el debate el exgobernador Gerardo Alckmin, vicepresidente en la dupla de Lula para las elecciones de octubre.
Según el portal Poder360, el colegiado aglutinará en Sao Paulo a representantes de los partidos de los Trabajadores (PT), Comunista de Brasil, Socialista Brasileño, Solidaridad, Socialismo y Libertad, Verde y Red de Sustentabilidad.
De la alianza electiva en torno al fundador del PT derivarán los grupos con funciones más ejecutivas de la campaña, como la comunicación y los compromisos.
El sitio asegura que, en la cita de este lunes, los presentes deberán discutir el escenario electoral que muestran las encuestas, la coordinación de la cruzada proselitista y los compromisos de Lula como precandidato presidencial del PT.
A principios de junio, indica, el exgobernante debería ir a Río Grande do Sul y, probablemente, a Santa Catarina, dos estados en los cuales tiene fuerte respaldo el mandatario de tendencia ultraderechista Jair Bolsonaro, quien pretende reelegirse ante las urnas.
También, siempre de acuerdo con la fuente, resulta factible que el extornero mecánico visite el próximo mes divisiones territoriales del Norte. Al menos Pará y Amazonas estarán en el itinerario.
Poder360 alega que los viajes son importantes para la precampaña porque «atraen la atención del electorado local. Hay exposición mediática y movilización de partidarios y simpatizantes en las ciudades».
Lula culminó el 11 de mayo en el municipio Juiz de Fora, en el estado de Minas Gerais (sudeste), un recorrido para discutir alianzas políticas hacia el sufragio.
En ese distrito, el líder petista dio punto final a una gira de tres días que incluyó visitas a Belo Horizonte, capital de Minas Gerais, y a la ciudad Coragem, donde declaró que, para gobernar, es necesario pensar en el pueblo trabajador.
Repitió algo dicho durante la presentación del movimiento Vamos Juntos por Brasil: «gobernar solo es posible si se pone el corazón en ello (…) No se trata de contabilidad, de mirar las cifras de ingresos y gastos. De hecho, tenemos una deuda social con 215 millones de brasileños que necesitan vivir con dignidad», apostilló.
Para el exdirigente sindical, desde el momento en que las políticas se piensan desde la base de la pirámide social, para luego dirigirse a la cima, la tarea de mejorar el país se hace más fácil.
La más reciente encuesta de la empresa PoderData, subsidiaria de Poder360, muestra al expresidente con un 42 por ciento de favoritismo frente al 35 de Bolsonaro en la simulación de la primera vuelta de la consulta, prevista para el 2 de octubre.