Un preocupante estudio reciente advierte que los casos de cáncer en hombres podrían casi duplicarse para el año 2050, con un alarmante aumento del 93% en las muertes relacionadas con esta enfermedad. La investigación, realizada por la Universidad de Queensland, Australia, y publicada en la revista Cancer de la Sociedad Americana del Cáncer, analizó datos de 30 tipos de tumores en 185 países, destacando las crecientes disparidades en función de la edad y la situación económica de las naciones.
Según el estudio, en 2022 los hombres ya presentaban tasas de cáncer y mortalidad más elevadas que las mujeres, una tendencia que podría intensificarse en las próximas décadas. Factores como una menor participación en actividades de prevención, una infrautilización de las opciones de cribado y tratamiento, y una mayor exposición a riesgos como el tabaquismo, el consumo de alcohol y la exposición laboral a agentes carcinógenos, contribuyen a esta disparidad.
Las proyecciones indican que los casos de cáncer en hombres pasarán de 10,3 millones en 2022 a 19 millones en 2050, mientras que las muertes aumentarán de 5,4 millones a 10,5 millones. Este incremento será especialmente notable entre los hombres mayores de 65 años y en países con un bajo índice de desarrollo humano, donde la infraestructura sanitaria es insuficiente para enfrentar la creciente carga de la enfermedad.
El cáncer de pulmón, actualmente la tercera causa de muerte en España y fuertemente asociado al tabaquismo, se mantiene como el tipo de cáncer más común en términos de casos y muertes. A pesar de las variaciones según la edad y la región, los investigadores destacan la urgente necesidad de fortalecer la calidad y accesibilidad de los servicios de salud en todo el mundo, promoviendo la cobertura sanitaria universal y financiando programas específicos para la detección y prevención del cáncer en hombres.
Habtamu Mellie Bizuayehu, uno de los autores del estudio, subraya la importancia de invertir en infraestructuras sanitarias y en la formación de personal médico, especialmente en países con un bajo o medio índice de desarrollo humano. «La implantación y ampliación de la cobertura sanitaria universal es crucial para mejorar la atención oncológica y reducir las desigualdades que seguirán creciendo si no se toman medidas inmediatas», concluye Bizuayehu.
Este estudio pone en evidencia la necesidad de una respuesta global y coordinada para enfrentar el creciente desafío del cáncer en hombres, asegurando que todos, independientemente de su lugar de residencia o situación económica, tengan acceso a un tratamiento y diagnóstico adecuado.