Editor web Maya Comunicación 
Por Bruno Cortés
El narcotráfico en México es un complejo entramado de organizaciones criminales que controlan el tráfico de drogas, principalmente hacia Estados Unidos, pero también hacia otros mercados internacionales. La estructura y el poder de estos grupos han evolucionado significativamente desde la década de los 80, cuando el Cartel de Guadalajara dominaba las operaciones, hasta la actualidad, donde una serie de cárteles compiten y colaboran en un mercado criminal altamente violento y lucrativo.
El Cartel de Sinaloa y el CJNG: Actualmente, dos de las organizaciones más influyentes son el Cartel de Sinaloa y el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG). El Cartel de Sinaloa, incluso después de la captura y extradición de su líder emblemático, Joaquín «El Chapo» Guzmán, sigue siendo una fuerza poderosa en el tráfico de drogas como la heroína, la cocaína y especialmente el fentanilo. Su presencia se extiende a lo largo y ancho de México y tiene operaciones en varios continentes. Por otro lado, el CJNG, bajo el mando de Nemesio Oseguera Cervantes, «El Mencho», ha crecido exponencialmente, especializándose en drogas sintéticas y enfrentándose violentamente con otros cárteles y las fuerzas de seguridad mexicanas.
Estructura y Operaciones: Estos cárteles no solo se dedican al tráfico de drogas; han diversificado sus actividades hacia el secuestro, la extorsión, el robo de combustible, el tráfico de armas y de personas, entre otros delitos. Su capacidad para corromper a funcionarios y mantener redes de inteligencia hace que la lucha contra ellos sea extremadamente compleja. La estructura de estos grupos suele incluir desde «falcones» o informantes en las calles hasta líderes con vínculos internacionales, lo que les permite operar como redes transnacionales de criminalidad.
Impacto en la Sociedad: La violencia asociada con estos cárteles ha tenido consecuencias devastadoras en la sociedad mexicana. Ciudades como Ciudad Juárez, Culiacán, y las regiones del Triángulo Dorado han sido testigos de altos niveles de violencia, con enfrentamientos que a menudo resultan en numerosas víctimas civiles. Además, la captura o muerte de líderes suele generar luchas internas por el poder, exacerbando la violencia.
Respuesta Gubernamental: La estrategia gubernamental ha variado desde la guerra frontal contra los cárteles iniciada por el expresidente Felipe Calderón en 2006, conocida como la «Guerra contra el Narco», hasta enfoques más pacíficos propuestos por el presidente Andrés Manuel López Obrador, bajo el lema «Abrazos, no balazos». Sin embargo, la efectividad de estas estrategias ha sido debatida, y el control territorial de los cárteles sigue siendo significativo.
Evolución y Fragmentación: Con el tiempo, muchos cárteles han sufrido divisiones y fragmentaciones. Grupos como Los Zetas, originalmente el brazo armado del Cartel del Golfo, se han separado y formado sus propias organizaciones, como el Cartel del Noreste. La lucha por el control de plazas y rutas de tráfico ha dado lugar a una proliferación de grupos más pequeños pero igualmente peligrosos.
Economía del Crimen: Los cárteles han creado una economía paralela, generando empleo y riqueza a través de actividades ilícitas. Algunos estudios sugieren que el narcotráfico podría ser uno de los mayores generadores de empleo en México, superando incluso a corporaciones líderes como Pemex o Oxxo, con estimaciones de hasta 175,000 personas trabajando directa o indirectamente para estos grupos.
Desafíos y Perspectivas: Mientras México intenta abordar este problema, los desafíos incluyen no solo la violencia y la corrupción interna sino también la demanda externa, particularmente de Estados Unidos, y la lucha contra la producción y tráfico de drogas sintéticas que han aumentado su presencia en el mercado. La cooperación internacional, la reforma del sistema judicial, y nuevas estrategias de seguridad son vistas como esenciales para mitigar el poder de estos cárteles.
El panorama del narcotráfico en México continúa siendo uno de los mayores retos para la estabilidad y seguridad del país, con implicaciones que afectan no solo a México sino también a la región y el mundo.
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