Texas a 29 de julio, 2024.- El pasado jueves 25 de julio, la Administración de Control de Drogas (DEA) logró la captura del líder del Cártel de Sinaloa, Ismael “El Mayo” Zambada, en Texas, Estados Unidos. Junto a él, también fue detenido Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán. La detención se llevó a cabo tras una intensa operación en la que la DEA ofrecía una recompensa de 15 millones de dólares por información que condujera a la captura de Zambada.
El historial delictivo de “El Mayo” Zambada es extenso y severo. Según la ficha emitida por la DEA, se le imputan varios cargos, entre los que se incluyen:
- Violaciones federales de drogas
- Conspiración para poseer cocaína y marihuana
- Conspiración para importar cocaína y marihuana
- Lavado de dinero
- Posesión de armas de fuego
- Tráfico de drogas
- Extorsión
- Asesinato para promover su organización criminal
- Participación en empresa criminal para promover tráfico de drogas
- Conspiración para “matar” en país extranjero
- Secuestro y complicidad
Zambada enfrenta cargos en al menos cuatro jurisdicciones en Estados Unidos: Illinois, Texas, Nueva York y el Distrito de Columbia, según la Agencia EFE. Además, en febrero de este año, el gobierno de Estados Unidos presentó cargos formales contra él por tráfico de fentanilo, acusándolo de conspirar para fabricar y distribuir esta sustancia altamente peligrosa.
A pesar de la gravedad de las acusaciones, el fundador del Cártel de Sinaloa se ha declarado inocente de todos los cargos ante una Corte Federal en Texas, de acuerdo con su abogado. Este caso marca un momento crucial en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, subrayando el alcance de las actividades ilícitas del cártel y la respuesta de las autoridades internacionales.
La captura de “El Mayo” Zambada representa un golpe significativo al Cártel de Sinaloa, una de las organizaciones criminales más poderosas del mundo. Las autoridades continúan trabajando para desmantelar su red y llevar a la justicia a sus líderes.