Por Bruno Cortés
En una reciente crítica cargada de ironía y sarcasmo, la senadora del Partido Acción Nacional (PAN), Lilly Téllez, no dejó pasar la oportunidad para cuestionar el último Grito de Independencia del presidente Andrés Manuel López Obrador. Durante su participación en el noticiero de Ciro Gómez Leyva, Téllez expresó su desacuerdo con la inclusión de arengas como “¡Viva la Cuarta Transformación!” en el evento que tuvo lugar en la plancha del Zócalo capitalino.
Para Téllez, el Grito de Independencia de AMLO no fue un simple acto patriótico, sino una plataforma para promover sus políticas y criticar a sus opositores. La senadora ironizó sobre el discurso del presidente, sugiriendo que lo que realmente se celebraba era un listado de quejas y acusaciones hacia el gobierno actual. Entre sus comentarios, Téllez incluyó frases como: “¡Viva la captura del Poder Judicial!” y “¡Viva el pacto con el crimen organizado!”, pintando un panorama oscuro sobre la gestión de López Obrador.
En su crítica, la senadora también mencionó a varios personajes y temas polémicos, como la jueza Yasmín Esquivel y el exministro Arturo Zaldívar, sugiriendo que el presidente estaba celebrando más bien una serie de prácticas corruptas y controversiales. Téllez destacó la percepción de que el actual gobierno ha favorecido a ciertos grupos y ha dejado de lado la lucha efectiva contra el crimen y la corrupción.
El Grito de Independencia, tradicionalmente un momento de unidad y celebración nacional, se convirtió en esta ocasión en un campo de batalla político, donde las arengas del presidente fueron vistas por algunos como una oportunidad para reforzar sus posturas ideológicas y políticas. Téllez no escatimó en críticas, y su intervención reflejó el creciente clima de tensión entre el Ejecutivo y la oposición.
Las palabras de Téllez son una muestra de la polarización política que caracteriza al actual contexto mexicano. Mientras algunos defienden las políticas del presidente como necesarias para la transformación del país, otros, como Téllez, las ven como un intento de consolidar un poder que, según ellos, va en detrimento de la justicia y la equidad.