Ciudad de México, 22 de diciembre de 2023 – Según el más reciente informe del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), la inflación anual de la canasta básica de productos agropecuarios en México ha registrado una ligera disminución al cerrar la primera quincena de diciembre. Este dato refleja una baja de 6.5 por ciento, comparado con el 6.7 por ciento observado en noviembre, marcando un alivio en la presión inflacionaria en el sector alimentario.
En una mirada detallada, la Ciudad de México experimentó un incremento de 6 a 6.6 por ciento, mientras que en ciudades como Guadalajara y Monterrey se observó una reducción de 7.3 a 6.5 y de 6.8 a 6.5 por ciento, respectivamente. Esta variación indica una tendencia heterogénea en diferentes regiones del país.
Resulta significativo contrastar estos datos con los del año anterior, donde en diciembre de 2022 la inflación alcanzó un máximo histórico de 15.8 por ciento, lo que subraya una notable disminución en la inflación alimentaria en el lapso de un año.
Al desglosar la canasta básica, se destaca que el índice de precios de proteína animal aumentó solo un 0.8 por ciento. Este leve incremento se vio influenciado por el aumento del 5.8 por ciento en el precio de la leche y del 4.1 por ciento en el huevo. Sin embargo, este impacto fue parcialmente contrarrestado por la disminución del 3.8 por ciento en la carne de cerdo y del 1.7 por ciento en la salchicha.
En lo que respecta a granos y abarrotes, el índice de precios mostró un aumento anual del 7.6 por ciento. Este segmento se benefició de una caída significativa en los precios internacionales, con un descenso del 39.1 por ciento en el maíz y del 24.6 por ciento en granos en general.
Sin embargo, no todos los productos mostraron tendencias decrecientes. Las galletas, el azúcar, el frijol y el bolillo registraron inflaciones de 22.6, 22.3, 15.8 y 12.4 por ciento respectivamente. Por otro lado, la harina de trigo experimentó una reducción en su precio del 10.2 por ciento.
En cuanto a las frutas, el índice anual de precios subió un 6.5 por ciento. La fresa lideró con una inflación del 36 por ciento, seguida por el limón con 34.4 por ciento y la papaya con 25 por ciento. Algunas frutas, sin embargo, mostraron disminuciones significativas en sus precios, como la manzana (18.5 por ciento), la uva (12.5) y la naranja (10.1).
Finalmente, el índice de precios hortícolas reflejó una disminución anual del 5.3 por ciento. El chile serrano encabezó esta caída con una reducción del 46.6 por ciento, seguido por la lechuga romana con 38 por ciento, el jitomate bola con 20.1 por ciento y el jitomate saladette con 18.6 por ciento. En contraste, algunos productos como el chile poblano, la zanahoria y el tomate verde mostraron incrementos notables.