A un año de su detención, Hugo Adolfo Karam, exjefe de la Policía Judicial de Puebla, ha sido liberado del penal de Cancún, Quintana Roo, donde se encontraba recluido. La liberación se produjo la noche del 6 de agosto tras un cambio en sus medidas cautelares, resultante de un amparo promovido en el Juzgado Segundo de Distrito. Karam continuará su proceso en libertad condicional, con restricciones para salir de Cancún y la obligación de presentarse una vez al mes ante las autoridades de justicia.
Karam había sido detenido el 13 de julio de 2023 en Boca del Río, Veracruz, bajo la acusación de tortura en agravio de la periodista Lydia Cacho. La Fiscalía General de la República (FGR) le imputaba su “probable participación en una estructura organizada de poder dentro del Ejecutivo del estado de Puebla”, con el propósito de afectar la integridad de Cacho en represalia por la publicación de su libro de investigación, Los demonios del Edén.
En 2005, Lydia Cacho reveló en su libro casos de trata de personas y redes de pornografía infantil, mencionando a figuras prominentes como Jean Succar Kuri y Mario Marín. Succar Kuri, un hotelero libanés, fue sentenciado a 93 años de prisión en 2006 por pederastia y falleció en junio de 2023. Marín, gobernador de Puebla entre 2005 y 2011, fue detenido en febrero de 2021 y sigue encarcelado en el penal de ‘El Altiplano’, pese a sus intentos de obtener amparos.
La detención de Lydia Cacho en diciembre de 2005, bajo una orden que supuestamente había sido emitida por Marín y ejecutada por Karam, estuvo acompañada de tortura psicológica. Durante el traslado, Cacho reportó haber sido amenazada de muerte por los agentes. Finalmente, la periodista fue liberada tras pagar una fianza y exonerada en enero de 2006.
Lydia Cacho, quien adquirió la nacionalidad española en noviembre de 2021, ha continuado su carrera literaria con obras como #Ellos hablan (2018), Cartas de amor y rebeldía (2022) y Rebeldes y libres: si el feminismo no es de todas, no es de ninguna (2023).
La liberación de Karam marca un nuevo capítulo en un caso que ha sido emblemático en la lucha contra la corrupción y la violencia de Estado en México. La decisión de liberarlo bajo condiciones restringidas refleja la complejidad y el impacto prolongado de las investigaciones y acusaciones que han sacudido al país durante más de una década.