Ciudad de México, a 6 de junio de 2023.- Hay ciertas preguntas que todos nos hacemos alguna vez en la vida, y por qué flotan los barcos es una de las más recurrentes. Desde niños, nos causa sorpresa que las grandes embarcaciones se mantengan a flote sobre la superficie marítima u oceánica.
Hay varias explicaciones para este fenómeno único que permite que puedan surcarse las aguas e ir de Europa a América. El Titanic, y también los aún más enormes cruceros actuales, no se hunden por el llamado principio de flotabilidad de Arquímedes.
Las embarcaciones son capaces de flotar en el mar o en el agua de río por una ley física conocida como el Principio de Arquímedes. Esta ley viene a decir que existe una fuerza que empuja al barco desde abajo hacia arriba gracias a un diseño basado en esta propia ley.
Porqué floten los barcos
Y ¿qué es la densidad? La densidad es la cantidad de materia que existe por unidad de volumen. Esto quiere decir que, si hacemos 1 metro cúbico de hierro, por sí mismo y su densidad, se hundirá en el mar. Ahora bien, si este mismo metro cúbico lo construimos con esfera hueca, su volumen denso será mayor que la esfera sólida, por lo tanto, el agua la empujará hacia arriba.
Demostración de Arquímedes
En el siglo III, Arquímedes introdujo una idea que cambiaría para siempre la forma en la que los seres humanos nos desplazamos. Descubrió que ciertos objetos podían permanecer sobre el agua si su fuerza ascendente era mayor que la fuerza descendente, entendiendo esta última como la fuerza de gravedad. Aquello aplicaba a los nadadores, pero además a todo tipo de barcos.
Con el paso del tiempo, el principio de flotabilidad de Arquímedes derivó en la actual ley de flotación. Según ésta, los materiales cuya densidad es inferior a la del líquido en el que están sumergidos flotarán sobre el mismo. Por ejemplo, la madera flota sobre el agua.
Esta explicación consta de dos partes: el estudio de las fuerzas sobre una porción de fluido en equilibrio con el resto del fluido; y una segunda parte donde se sustituye dicha porción por un cuerpo sólido de la misma forma y dimensiones.
La importancia de la estructura del barco
Pero para que una embarcación de miles de toneladas facilite su flotación, debe contar con una estructura diseñada a tales fines. Debe flotar, pero asimismo ser capaz de moverse a altas velocidades. Y el secreto está en algunos puntos de su arquitectura. Básicamente, el casco estará formado por huecos de acero que contienen el aire necesario para que no se vaya al fondo.
De hecho, si observas con atención notarás que los cruceros y similares llevan unas líneas de agua, o líneas de Plimsoll, indicando hasta qué punto puede sumergirse la embarcación. Si pasa de allí por su peso o densidad, es probable que su destino sea entonces otro.