CDMX a 13 de agosto, 2024.- Larry Curtis Parker, el piloto que ha sido señalado por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador como presunto responsable de trasladar a Estados Unidos a Ismael ‘El Mayo’ Zambada y a Joaquín Guzmán López, hijo de ‘El Chapo’, ha roto el silencio. A través de un documento difundido por la periodista Azucena Uresti para Radio Fórmula, Curtis Parker negó rotundamente cualquier involucramiento en la operación que resultó en la captura de los líderes del Cártel de Sinaloa y solicitó al presidente que limpie su nombre.
En su declaración, Curtis Parker expresó su indignación ante las acusaciones en su contra, pidiendo al presidente López Obrador que reconozca públicamente su error: “Le pediría al presidente que limpie mi nombre y reconozca públicamente que no tuve absolutamente nada que ver con este incidente”. El piloto, quien ha recibido una avalancha de llamadas de periodistas desde que se conoció la noticia, aseguró que no emprenderá acciones legales y que confía en que las investigaciones en curso demostrarán su inocencia.
Curtis Parker detalló que no tiene planes de regresar a México, calificando su implicación en el caso como “un error honesto por parte de las autoridades mexicanas”. El piloto explicó que la confusión pudo haberse originado por información proporcionada por Migración, la cual coincidía con el aeropuerto donde presuntamente aterrizaron Zambada y Guzmán López.
En la mañanera del martes pasado, el presidente López Obrador reconoció que podría haberse cometido un error en el informe que vinculaba a Curtis Parker con las detenciones de los capos del Cártel de Sinaloa. “Parece que no fue él (…) Se dio esta información porque se obtuvo de parte de Migración, que coincidía sobre todo con el aeropuerto a donde llegaron estas personas, pero ya ahora se tiene más información”, aclaró el mandatario.
Este incidente subraya la importancia de la precisión en las comunicaciones oficiales, especialmente en casos tan delicados como la captura de líderes del crimen organizado. La situación de Curtis Parker ha puesto en el centro del debate la responsabilidad de las autoridades en la difusión de información y las consecuencias que pueden tener las acusaciones infundadas en la vida de personas inocentes.
A medida que avanzan las investigaciones, se espera que se esclarezca completamente la participación —o falta de ella— de Curtis Parker en este caso, lo que podría tener implicaciones significativas tanto para su reputación como para la confianza en las instituciones mexicanas.