El Gran Premio de Australia 2025 en el circuito de Albert Park, Melbourne, fue testigo de una emocionante apertura de temporada en la Fórmula 1. Lando Norris, piloto británico de McLaren-Mercedes y actual subcampeón mundial, se alzó con la victoria en una carrera marcada por condiciones climáticas adversas y múltiples incidentes en pista.

Desde la pole position, Norris mantuvo la calma frente a la presión constante del campeón defensor, Max Verstappen de Red Bull Racing. A pesar de la lluvia intermitente que complicó la competencia, Norris gestionó su liderazgo con maestría. «Fue una carrera increíble, especialmente con Max detrás de mí», comentó Norris tras cruzar la meta. «Apreté a fondo, sobre todo en las últimas dos vueltas; fue un poco estresante, no les voy a mentir».

Verstappen, quien finalizó en segundo lugar, reconoció la dificultad de la carrera y elogió la competencia. «Lando se asustó un poco, por lo cual pude acercarme; fue divertido luchar por la victoria», declaró el neerlandés.

El británico George Russell, al volante de un Mercedes, completó el podio en tercera posición. Por su parte, el debutante italiano Andrea Kimi Antonelli impresionó al finalizar cuarto en su primera carrera con Mercedes, demostrando su potencial en la categoría reina del automovilismo.

Lewis Hamilton, en su debut con Ferrari, enfrentó dificultades y culminó en la décima posición. El equipo italiano cometió errores estratégicos al demorar el cambio de neumáticos cuando la lluvia arreció, afectando el rendimiento tanto de Hamilton como de su compañero, Charles Leclerc, quien finalizó octavo. «El coche estaba muy difícil de conducir hoy y la mayor parte del tiempo busqué no acabar en el muro», admitió Hamilton.

La carrera estuvo plagada de incidentes desde el inicio. El francés Isack Hadjar (Racing Bulls) se salió de pista durante la vuelta de formación, mientras que el australiano Jack Doohan (Alpine) y el español Carlos Sainz (Williams) abandonaron tras accidentes en la primera vuelta. Fernando Alonso también quedó fuera de competencia al perder el control de su Aston Martin en la vuelta 34.

La sólida actuación de McLaren-Mercedes en Australia posiciona al equipo como uno de los favoritos para la temporada 2025. La próxima cita será en el Gran Premio de China, donde se espera otra emocionante batalla en la lucha por el campeonato.