Por Juan Pablo Ojeda
Los Kansas City Chiefs siguen demostrando por qué son los campeones de la NFL. En un duelo vibrante y lleno de emociones, los Chiefs (12-1) lograron imponerse a los Los Ángeles Chargers (8-5) con un dramático gol de campo en el último segundo, que selló una victoria por 19-17. Aunque la victoria parecía asegurada para los bicampeones de la NFL en el tercer cuarto, los Chargers lograron una impresionante remontada, dejando el partido en un suspenso total hasta el final.
En los primeros dos cuartos, Kansas City dominó el encuentro. Con una actuación destacada del pateador Matthew Wright, quien anotó dos goles de campo, y un touchdown de DeAndre Hopkins, los Chiefs lograron tomar una ventaja cómoda de 12-0 al descanso. La defensiva de Los Ángeles no encontraba respuestas, y los Chiefs parecían marcharse hacia un triunfo tranquilo.
Sin embargo, en el tercer cuarto, los Chargers comenzaron a recortar la ventaja. Con una jugada terrestre de Gud Edwards, los visitantes se acercaron en el marcador, 12-7. No pasó mucho tiempo antes de que Los Ángeles tomara la delantera por primera vez en el juego. La defensiva de Kansas City cometió una interferencia en un pase de Justin Herbert a Quentin Johnson, lo que permitió a los Chargers posicionarse en campo rival. A partir de ahí, Herbert encontró a Stone Smartt para llegar a la zona roja, y luego conectó con Johnson para darle la vuelta al marcador, 13-14.
Los Chiefs no se dejaron intimidar y retomaron la ventaja con un gol de campo de Wright, pero la respuesta de Los Ángeles fue inmediata con otro gol de campo de Cameron Dicker. Así, el partido se definió en los últimos minutos, con los equipos empatados en 17 puntos.
Fue en esos momentos donde Patrick Mahomes, como siempre, brilló. En una jugada clave en tercera y 10, Mahomes parecía acorralado, pero eludió a los defensivos de los Chargers y lanzó un pase perfecto a Xavier Worthy. Luego, en otra tercera oportunidad, el mariscal de campo de los Chiefs volvió a mostrar su magia, evadiendo una tacleada para conectar con Travis Kelce y dejar el marcador listo para el gol de campo final.
Cuando parecía que el tiempo se agotaba, la suerte volvió a sonreírle a los campeones. Aunque el gol de campo parecía sencillo para Wright, el balón pegó en el poste antes de cruzar la línea de gol, enviando a los Chiefs a la victoria y asegurando por noveno año consecutivo el título divisional de la AFC Oeste.
Este dramático triunfo, que volvió a evidenciar la capacidad de los Chiefs para salir a flote en momentos difíciles, mantiene a Kansas City en lo más alto de la NFL, con una marca de 12-1, y les asegura un lugar en los playoffs, con la mirada puesta en la búsqueda de su tercer Super Bowl consecutivo.