La Nueva Central de Camiones de San Pedro Tlaquepaque, ubicada en la zona metropolitana de Jalisco, ha sido identificada como un foco rojo en el tema de desapariciones. Así lo denunció recientemente la alcaldesa de Tlaquepaque, Laura Imelda Pérez Segura, quien alertó sobre el incremento de personas desaparecidas en esta zona. Según la funcionaria, al menos 67 personas han desaparecido en este sitio, muchas de ellas engañadas por grupos criminales que se hacen pasar por empresas que prometen empleo.
El modus operandi de estos grupos delictivos es bien conocido por las autoridades locales. Los delincuentes atraen a sus víctimas ofreciéndoles trabajos falsos y, una vez que abordan los camiones que aparentemente las llevarán a sus nuevos empleos, los secuestran. Lo más alarmante es que las líneas de transporte que operan en la Central de Camiones no exigen la identificación de los pasajeros, lo que hace aún más difícil rastrear a las víctimas y frenar estos casos de desaparición.
La alcaldesa de Tlaquepaque presentó una iniciativa en la Cámara de Diputados para exigir mayores medidas de seguridad en las terminales de autobuses. La propuesta, respaldada por legisladores de los partidos Movimiento Ciudadano y Morena, tiene como objetivo prevenir más desapariciones y garantizar la seguridad de los ciudadanos que utilizan el transporte público en esta central.
Este hallazgo se suma a la creciente preocupación sobre los casos de desapariciones en el estado de Jalisco, que ha visto en los últimos años un aumento alarmante de estos casos. Las autoridades locales han hecho un llamado a la colaboración de la sociedad y el gobierno federal para enfrentar esta crisis.
Este nuevo caso resalta la urgencia de tomar medidas en Jalisco, un estado que ha enfrentado en los últimos años una grave crisis de desapariciones. Según los datos del Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas, Jalisco es uno de los estados con más denuncias de desapariciones en México, lo que coloca a la región en una situación crítica de seguridad.
El hallazgo de un crematorio clandestino en Teuchitlán, Jalisco, realizado por colectivos de búsqueda, ha sacado a la luz la magnitud de la violencia y la falta de control en áreas del estado. Las desapariciones vinculadas con el crimen organizado siguen siendo un problema sin resolver, y la inseguridad parece extenderse a zonas estratégicas como la Central de Camiones de Tlaquepaque.
La propuesta presentada por Laura Imelda Pérez Segura es una de las pocas medidas que buscan dar solución a esta problemática. La alcaldesa destacó la importancia de regular las prácticas de seguridad en las terminales de autobuses y en los lugares de mayor tránsito, que frecuentemente son puntos vulnerables para las personas más desprotegidas. Además, hizo un llamado a las autoridades federales para coordinar esfuerzos con el estado y fortalecer las medidas contra el crimen organizado en la zona.
Aunque aún no se han establecido las soluciones definitivas para frenar las desapariciones, la alerta sobre la situación en la Central de Tlaquepaque ha puesto en primer plano la necesidad urgente de reformas en la seguridad del transporte público y en las políticas locales de protección ciudadana.